<?xml version="1.0" encoding="UTF-8"?><rss version="2.0" xmlns:content="http://purl.org/rss/1.0/modules/content/" xmlns:wfw="http://wellformedweb.org/CommentAPI/" xmlns:dc="http://purl.org/dc/elements/1.1/" xmlns:atom="http://www.w3.org/2005/Atom" xmlns:sy="http://purl.org/rss/1.0/modules/syndication/" xmlns:slash="http://purl.org/rss/1.0/modules/slash/" > <channel> <title>Contaminación atmosférica – Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia – CR2</title> <atom:link href="https://www.cr2.cl/category/contaminacion-atmosferica/feed/" rel="self" type="application/rss+xml" /> <link>https://www.cr2.cl</link> <description>Centro Fondap sobre cambio climático</description> <lastBuildDate>Tue, 10 Sep 2024 13:02:55 +0000</lastBuildDate> <language>es</language> <sy:updatePeriod> hourly </sy:updatePeriod> <sy:updateFrequency> 1 </sy:updateFrequency> <generator>https://wordpress.org/?v=6.5.5</generator> <item> <title>En Clima de Conversación Cap 8: Contaminación atmosférica, entrevista a Nicolás Huneeus</title> <link>https://www.cr2.cl/cap-8-en-clima-de-conversacion/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 02 Sep 2024 14:29:19 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[Podcast]]></category> <category><![CDATA[slider]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[En clima de conversación]]></category> <category><![CDATA[Nicolás Huneeus]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=45916</guid> <description><![CDATA[Octavo capítulo del podcast En Clima de Conversación, generado por el equipo de comunicaciones del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2. En este capítulo conversamos con el investigador CR2, Nicolás Huneeus, sobre la contaminación atmosférica, la calidad del aire en Chile y la posibilidad de tener eventos de contaminación durante septiembre, producto […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Octavo capítulo del podcast En Clima de Conversación, generado por el equipo de comunicaciones del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2.</strong></p> <p>En este capítulo conversamos con el investigador CR2, Nicolás Huneeus, sobre la contaminación atmosférica, la calidad del aire en Chile y la posibilidad de tener eventos de contaminación durante septiembre, producto del <a href="https://www.cr2.cl/efecto-asado-contaminacion-aumentaria-durante-estas-fiestas-patrias-el-dinamo/" target="_blank" rel="noopener"><em>efecto asado</em>.</a></p> <p><span style="font-weight: 400;"> Sobre los entrevistado: <strong>Nicolás Huneeus</strong>, es Ingeniero civil Químico de la Universidad de Chile y doctor en ciencias atmosféricas. Actualmente, se desempeña como académico del departamento de Geofísica de la Universidad de Chile y como investigador de la línea Ciudades Resilientes del CR2. </span></p> <p>Escucha el capítulo completo aquí:</p> <p><iframe style="border-radius: 12px;" src="https://open.spotify.com/embed/episode/54xkoOpfrmnvXEv3dUm1Lt?utm_source=generator" width="100%" height="352" frameborder="0" allowfullscreen="allowfullscreen"></iframe></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Ansiedad ambiental o el temor a enfrentar el cambio climático (El Tipógrafo)</title> <link>https://www.cr2.cl/ansiedad-ambiental-o-el-temor-a-enfrentar-el-cambio-climatico-el-tipografo/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 22 Jul 2024 15:37:45 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Ciudades resilientes]]></category> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Gobernanza e interfaz ciencia-política]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[ecoansiedad]]></category> <category><![CDATA[Gonzalo Palomo]]></category> <category><![CDATA[prensa nacional]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=45484</guid> <description><![CDATA[Hay un nuevo escenario mundial en temas climatológicos, en que el miedo se hace presente y genera una visión negativa del futuro, y en algunos casos, haciendo entrar en negación a las personas. Lluvias intensas, olas de frío polar, calor sobre 34°C, inundaciones, salidas de ríos, aluviones, incendios forestales y aluviones; todos estos fenómenos climáticos […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Hay un nuevo escenario mundial en temas climatológicos, en que el miedo se hace presente y genera una visión negativa del futuro, y en algunos casos, haciendo entrar en negación a las personas.</strong></p> <p>Lluvias intensas, olas de frío polar, calor sobre 34°C, inundaciones, salidas de ríos, aluviones, incendios forestales y aluviones; todos estos fenómenos climáticos podrían ser parte de una película apocalíptica, pero los hemos vivido en los últimos tres años en la Región de O’Higgins, producto del cambio climático. Ese temor ante los efectos que tendrá estos cambios radicales en las condiciones climáticas, están generando una ansiedad ambiental.</p> <p>Esta sería un miedo crónico ante la crisis ambiental y sus consecuencias, y que tiene mucho que ver con la exposición mediática de observar el impacto del cambio climático en distintos aspectos de nuestras vidas.</p> <p><strong>¿Qué es la ansiedad ambiental?</strong></p> <p>“Se entiende como un estado de activación o alerta que subjetivamente se experimenta como negativo. Es similar al miedo, pero deriva de creencias relacionadas a la crisis climática o a catástrofes ambientales. En algunas personas, dicho estado puede llevar a problemas psicológicos y/o trastornos clínicos. Sin embargo, la literatura científica relevante y las instituciones formales asociadas a la a la praxis clínica de la profesión, no la han clasificado –aún- como una condición clínica propiamente tal. No obstante esto, la ansiedad climática reiteradamente ha sido asociada a condiciones como la ansiedad generalizada y malestar”, explica el académico del Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad de O’Higgins (UOH), Gonzalo Palomo.</p> <p>Como explica el investigador UOH, si bien el estudio de la ansiedad climática ha sido relativamente incipiente en Latinoamérica, en Chile existen algunos trabajos que ya han avanzado sobre este tema. “Con parte del equipo de Gobernanza e Interfaz Ciencia-Política del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, donde colaboro, medimos hace algunos meses la ansiedad climática que reportan investigadores e investigadoras que trabajan en temas asociados a cambio climático en Chile. Esto llevó a un manuscrito que está actualmente en revisión en una revista indexada internacional”, añade el investigador</p> <p><strong>Chile y eventos climáticos extremos</strong></p> <p>Una sociedad como la chilena, acostumbrada a las situaciones climáticas adversas, como lluvias, sequía, remociones en masa, además de sismos, actividad volcánica, tsunamis e incendios forestales de magnitud (debido a la sequía), entre otras amenazas, podría estar en riesgo de experimentar mayores niveles ansiedad ambiental.</p> <p>“Hay literatura que apunta a que factores contextuales –tales como condiciones climáticas adversas- pueden eventualmente gatillar ansiedad climática. Ahora, creo que lo más relevante son las consecuencias de la misma. Por cierto, que las consecuencias psicológicas clínicas son importantes y no deberían obviarse, pero además creo que es importante destacar los efectos comportamentales de este tipo de ansiedad, en particular en lo que respecta a comportamiento ambiental”, explica el Doctor en Psicología Social Evolucionista.</p> <p>Agrega que un poco de ansiedad es positivo, ya que activa y lleva a la acción. “Sin embargo, mucha ansiedad o ansiedad relativamente constante puede llevar al efecto contrario y paralizar a las personas que la experimenten. Es decir, ‘no puedo hacer nada, ¿qué sentido tiene hacer algo?’. Y en ese sentido, la ansiedad climática podría llevar a una menor acción climática”.</p> <p><strong>¿Cómo manejar un fenómeno que se ve nutrido por constantes catástrofes y mucha publicidad?</strong></p> <p>Gonzalo Palomo señala que las narrativas y el cómo se frasean los problemas ambientales es fundamental. “El catastrofismo climático y narrativas asociadas a la imposibilidad de revertir las tendencias, probablemente llevarán a mayor ansiedad y menor acción”.</p> <p>“No se trata de disminuir la importancia de la crisis, ni de negacionismo, sino que se trata de plantear el problema climático junto con estrategias accionables a nivel individual y social. Así, en principio, uno puede alertar sobre el problema y al mismo tiempo dar algunas luces sobre cómo abordarlo, reduciendo –de esta forma- la incertidumbre y la sensación de indefensión”, finaliza el académico. | Leer en <a href="https://eltipografo.cl/2024/07/ansiedad-ambiental-o-el-temor-a-enfrentar-el-cambio-climatico" target="_blank" rel="noopener">El Tipógrafo.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Inician campaña de medición ciudadana de aerosoles en la Región Metropolitana (InduAmbiente)</title> <link>https://www.cr2.cl/inician-campana-de-medicion-ciudadana-de-aerosoles-en-la-region-metropolitana-induambiente/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 10 Jun 2024 20:51:35 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Roberto Rondanelli]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=44817</guid> <description><![CDATA[Proyecto liderado por el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile permitirá evaluar la contaminación atmosférica urbana con gran precisión. Recientemente, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile recibió a un grupo de 50 voluntarios, quienes se […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Proyecto liderado por el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile permitirá evaluar la contaminación atmosférica urbana con gran precisión.</strong></p> <p>Recientemente, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile recibió a un grupo de 50 voluntarios, quienes se sumaron a la red de medición ciudadana de <strong>aerosoles</strong> de la <strong>Región Metropolitana</strong>. Interesados en la ciencia y en aportar a la investigación que realiza la Universidad de Chile, los participantes recibieron el instrumento desarrollado en Beauchef, el cual han instalado en sus casas, colegios o lugares de trabajo.</p> <p>Los <strong>aerosoles</strong> son todas las partículas líquidas y sólidas que están en suspensión, como la contaminación generada por vehículos o por quema de leña. Medir los <strong>aerosoles</strong>, en este sentido, es clave para entender cómo estos se distribuyen y mueven en zonas altamente pobladas como la <strong>Región Metropolitana</strong>. A escala de una ciudad, los <strong>aerosoles</strong> son parte fundamental de la <strong>contaminación atmosférica urbana</strong>, lo que impacta en la salud de las personas, en el medio ambiente y en las tecnologías (depositación en paneles solares).</p> <p>Gracias al trabajo de varias generaciones de estudiantes, el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (SPEL) del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la U. de Chile entregó a los voluntarios un fotómetro, instrumento de medición que fue íntegramente construido en el campus Beauchef de la Casa de Bello. Estos equipos de bajo costo se ven similares a una lámpara de velador y pesan menos de dos kilos. Los aparatos miden la intensidad de la luz que reciben desde el sol en un día despejado. La disminución de intensidad respecto a la intensidad medida desde el espacio permite, de esta forma, detectar la cantidad de <strong>aerosoles</strong> que hay en el camino entre el sol y el instrumento. Por ello, para la medición, cada voluntario ha instalado el instrumento en lugares donde estén expuestos al sol durante todo el día, como techos o azoteas durante junio y julio de este año.</p> <p><strong>Construcción de una red ciudadana</strong></p> <p>Hacer ciencia con la sociedad es uno de los objetivos que se propuso el equipo SPEL de la U. de Chile. Por ello, en marzo pasado hizo un llamado abierto a toda la ciudadanía para sumarse a la histórica hazaña de medir la dinámica de <strong>aerosoles</strong> desde distintos puntos de la Región Metropolitana durante los meses de otoño e invierno, convocatoria que despertó un importante interés por participar en esta iniciativa. Fue así como comenzó un proceso de inscripción donde se recibieron cerca de 200 postulaciones.</p> <p>Luego de un encuentro online y una fase de evaluación de los lugares de medición, hoy el equipo cuenta con 50 voluntarios, habitantes de toda la <strong>Región Metropolitana</strong>. Entre quienes se sumaron a la red de medición se encuentran jóvenes estudiantes (escolares y universitarios), jubilados de diversas profesiones, profesores, y habitantes de la región de otros variados oficios y profesiones, entre los 19 y los 78 años.</p> <p>La construcción de esta red es un proyecto que busca responder preguntas interdisciplinarias de investigación. La interpretación geofísica de los datos recolectados y su comparación con datos tomados con otros instrumentos (como satélites) estará a cargo de Roberto Rondanelli, académico del Departamento de Geofísica (DGF), mientras que la instrumentación y funcionamiento de los fotómetros estará a cargo del equipo SPEL, coordinado por Marcos Díaz, académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica. La investigación social y la componente humana de la construcción de la red, en tanto, es responsabilidad de la investigadora SPEL y profesora de ETHICS-FCFM, Sofía Vargas Payera.</p> <p>«Los desafíos durante la campaña son múltiples, como el contacto permanente con las y los voluntarios, la logística, si surgen necesidades de revisar algunos instrumentos, y la comunicación y procesamiento de los datos», señala Marcos Díaz. Sofía Vargas, por su parte, destaca que «habitantes de toda la <strong>Región Metropolitana</strong>, de distintas edades, comunas y oficios, llegaron a la FCFM para sumarse y ser parte de esta hazaña científica y social. Fue una jornada muy emocionante. Esto confirma que quienes hacemos investigación debemos generar y propiciar esos espacios de colaboración».</p> <p>Roberto Rondanelli, asimismo, valora el impacto de este tipo de mediciones. «Este proyecto presenta la posibilidad de tener mediciones de calidad científica a una escala y resolución espacial que no ha sido obtenida en ninguna parte del mundo, esto lo conseguimos gracias a la participación de todo el equipo de voluntarios», afirma el académico. | Leer en <a href="https://www.induambiente.com/noticias/inician-campana-de-medicion-ciudadana-de-aerosoles-en-la-region-metropolitana" target="_blank" rel="noopener noreferrer">InduAmbiente.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>U. de Chile inicia campaña de medición ciudadana de aerosoles en la Región Metropolitana (Prensa Uchile)</title> <link>https://www.cr2.cl/u-de-chile-inicia-campana-de-medicion-ciudadana-de-aerosoles-en-la-region-metropolitana-prensa-uchile/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 10 Jun 2024 15:55:00 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[campaña Aerosoles]]></category> <category><![CDATA[campaña ciudadana]]></category> <category><![CDATA[Roberto Rondanelli]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=44775</guid> <description><![CDATA[Durante los meses de otoño e invierno, el proyecto liderado por el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (SPEL) de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile realizará el primer monitoreo de aerosoles del país con la colaboración de un equipo de 50 voluntarias y voluntarios ubicados en distintos puntos […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Durante los meses de otoño e invierno, el proyecto liderado por el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (SPEL) de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile realizará el primer monitoreo de aerosoles del país con la colaboración de un equipo de 50 voluntarias y voluntarios ubicados en distintos puntos de la Región Metropolitana. A través de la instalación de fotómetros en techos y azoteas de casas, colegios y lugares de trabajo, la iniciativa permitirá evaluar la contaminación atmosférica urbana con gran precisión.</strong></p> <p>El pasado 25 de mayo de 2024 la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile recibió a un grupo de <strong>50 voluntarias y voluntarios, quienes se sumaron a la red de medición ciudadana de aerosoles de la Región Metropolitana</strong>. Interesados en la ciencia y en aportar a la investigación que realiza la Universidad de Chile, las y los participantes recibieron el instrumento desarrollado en Beauchef, el cual instalarán en sus casas, colegios o lugares de trabajo. La activa participación social y el equipo <em>«made in Beauchef»</em> serán clave para comprender qué ocurre con los aerosoles en la Región Metropolitana.</p> <p>Los aerosoles son todas las partículas líquidas y sólidas que están en suspensión, como la contaminación generada por vehículos o por quema de leña. Medir los aerosoles, en este sentido, es clave para<strong> entender cómo estos se distribuyen y mueven en zonas altamente pobladas como la Región Metropolitana</strong>. A escala de una ciudad, los aerosoles son parte fundamental de la contaminación atmosférica urbana, lo que impacta en la salud de las personas, en el medioambiente y en las tecnologías (depositación en paneles solares).</p> <p>Gracias al trabajo de varias generaciones de estudiantes, el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (SPEL) del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la U. de Chile entregó a las y los voluntarios un <strong>fotómetro, instrumento de medición que fue íntegramente construido en el campus Beauchef de la Casa de Bello</strong>. Estos equipos de bajo costo se ven similares a una lámpara de velador y pesan menos de dos kilos. Los aparatos miden la intensidad de la luz que reciben desde el sol en un día despejado. La disminución de intensidad respecto a la intensidad medida desde el espacio, de esta forma, permite detectar la cantidad de aerosoles que hay en el camino entre el sol y el instrumento. Por ello, para la medición, <strong>cada voluntario y voluntaria instalará el instrumento en lugares donde estén expuestos al sol durante todo el día, como techos o azoteas durante junio y julio de este año</strong>.</p> <h2>Construcción de una red ciudadana</h2> <p>Hacer ciencia con la sociedad es uno de los objetivos que se propuso el equipo SPEL de la U. de Chile. Por ello, en marzo pasado hizo un llamado abierto a toda la ciudadanía para sumarse a la histórica hazaña de medir la dinámica de aerosoles desde distintos puntos de la Región Metropolitana durante los meses de otoño e invierno, convocatoria que despertó un importante interés por participar en esta iniciativa. Fue así como comenzó un proceso de inscripción donde <strong>se recibieron cerca de 200 postulaciones</strong>.</p> <p>Luego de un encuentro online y una fase de evaluación de los lugares de medición, hoy el equipo cuenta con 50 voluntarias y voluntarios, habitantes de toda la Región Metropolitana. Entre quienes se sumaron a la red de medición se encuentran jóvenes estudiantes (escolares y universitarios), jubilados de diversas profesiones, profesores, y habitantes de la región de otros variados oficios y profesiones, entre los 19 y los 78 años.</p> <p>La construcción de esta red es un proyecto que busca responder preguntas interdisciplinarias de investigación. La interpretación geofísica de los datos recolectados y su comparación con datos tomados con otros instrumentos (como satélites) estará a cargo de <strong>Roberto Rondanelli</strong>, académico del Departamento de Geofísica (DGF), mientras que la instrumentación y funcionamiento de los fotómetros estará a cargo del equipo SPEL, coordinado por <strong>Marcos Díaz</strong>, académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica. La investigación social y la componente humana de la construcción de la red, en tanto, es responsabilidad de la<strong> </strong>investigadora SPEL y profesora de ETHICS-FCFM, <strong>Sofía Vargas Payera</strong>.</p> <p>“Los desafíos durante la campaña son múltiples, como el contacto permanente con las y los voluntarios, la logística, si surgen necesidades de revisar algunos instrumentos, y la comunicación y procesamiento de los datos”, señala Marcos Díaz. Sofía Vargas, por su parte, destaca que “<strong>habitantes de toda la Región Metropolitana, de distintas edades, comunas y oficios, llegaron a la FCFM para sumarse y ser parte de esta hazaña científica y social</strong>. Fue una jornada muy emocionante. Esto confirma que quienes hacemos investigación debemos generar y propiciar esos espacios de colaboración”.</p> <p>Roberto Rondanelli, asimismo, valora el impacto de este tipo de mediciones. “<strong>Este proyecto presenta la posibilidad de tener mediciones de calidad científica a una escala y resolución espacial que no ha sido obtenida en ninguna parte del mundo</strong>, esto lo conseguimos gracias a la participación de todo el equipo de voluntarios”, afirma el académico. | Leer en <a href="https://uchile.cl/noticias/217124/u-de-chile-inicia-campana-de-medicion-ciudadana-de-aerosoles" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Prensa Uchile.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>El aire que respiramos: Alarmante crisis ambiental y de salud pública en el país (El Ciudadano)</title> <link>https://www.cr2.cl/el-aire-que-respiramos-alarmante-crisis-ambiental-y-de-salud-publica-en-el-pais-el-ciudadano/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 03 Jun 2024 14:45:47 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Informe a las naciones]]></category> <category><![CDATA[informes CR2]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=44693</guid> <description><![CDATA[“Es fundamental que el Estado adopte medidas concretas para reducir la emisión de contaminantes y conmine a las industrias a la mitigación de gases contaminantes, para proteger el medio ambiente y la salud” Con la llegada de las estaciones frías del año la problemática de la calidad del aire en Chile se torna mucho más […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>“Es fundamental que el Estado adopte medidas concretas para reducir la emisión de contaminantes y conmine a las industrias a la mitigación de gases contaminantes, para proteger el medio ambiente y la salud”</strong></p> <p>Con la llegada de las estaciones frías del año la problemática de la calidad del aire en Chile se torna mucho más compleja. Los altos niveles de contaminación atmosférica que se respiran en varias regiones del país son un tema de creciente preocupación para los habitantes y una responsabilidad que las autoridades están llamadas a atender, con políticas efectivas que garanticen la salud pública y colectiva de las personas.</p> <div class="mx-auto text-center"> <div id="EC2021_SINGLE_EC2021_SINGLE_INTEXT_01_1038182" class="my-4 py-4" data-google-query-id="CLWEvuzUxIYDFbdGuAQdxewIKw"> <p>De acuerdo al más reciente Informe mundial sobre la calidad del aire, elaborado por la consultora suiza IQAir, para el año 2023 <strong>Chile ocupa el cuarto lugar en contaminación atmosférica en América Latina y el Caribe; sobrepasando los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud – OMS</strong>. México, El Salvador y Perú se ubican en los tres primeros lugares. Por su parte, <strong>Coyahique lidera la posición como la ciudad con el aire más contaminado en el país. También Temuco, Osorno, Puerto Montt, Puerto Varas, Padre Las Casas, Santiago. Otro aspecto, son los episodios que sufren zonas de sacrificio, como: Quintero – Puchuncaví, Huasco, Antofagasta, Tocopilla, entre otros.</strong></p> <div id="taboola-mid-article-thumbnails_1038182" class="my-5 py-5 border-top border-bottom trc_related_container trc_spotlight_widget tbl-trecs-container trc_elastic trc_elastic_thumbnails-mid" data-placement-name="Mid Article Thumbnails"> <div class="trc_rbox_container"> <div class="trc_rbox_header trc_rbox_border_elm"> <p>La excesiva presencia en el aire con contaminantes atmosféricos como el monóxido de carbono, el dióxido de azufre y el material particulado, es una de las razones principales de esta alarmante situación, <strong>que en las estaciones de otoño invierno se ve agravada por el uso de estufas de combustión a leña; principalmente en las regiones centro sur del país</strong>, donde este recurso continúa siendo el más económico y accesible para calefaccionar, en contextos en los que el aislamiento térmico de las viviendas es deficiente y la situación socioeconómica apremiante.</p> <p>La problemática no es menor, si se toma en consideración que los gases emitidos por la combustión de leña no solo contaminan el ambiente, generando un efecto de bruma que se torna irrespirable y reduce la visibilidad a muy pocos metros de distancia; sino que asimismo, han sido documentados los efectos nefastos que se generan sobre la salud, provocando afecciones respiratorias, enfermedades cardiacas, estrés oxidativo, condiciones inflamatorias, cáncer e incluso la muerte, en personas con condiciones de salud preexistentes y población como madres gestantes, bebés, niños y ancianos.</p> <p>En el año 2020, el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, publicó el informe <em>El aire que respiramos: pasado, presente y futuro – Contaminación atmosférica por MP2,5 en el centro y sur de Chile, en el que participaron </em>científicos asociados a la Universidad de Chile, la Universidad de Concepción y la Universidad Austral de Chile, <strong>evidenció que la contaminación atmosférica por material particulado (MP2,5), es la causa alrededor de 3.000 hospitalizaciones y cerca de 4.500 muertes al año en Chile.</strong></p> <div class="mx-auto text-center"> <div id="EC2021_SINGLE_EC2021_SINGLE_INTEXT_02_1038182" class="my-4 py-4" data-google-query-id="CN_AjO3UxIYDFRe8lQIdzt4A-g"> <p>Si bien, se advierte algunas mejorías, las medidas gubernamentales implementadas para mejorar la calidad del aire, resultan insuficientes. <strong>El monitoreo de la calidad del aire, mediante las 63 estaciones de medición existentes en el país, y el control de emisiones, mediante restricciones vehiculares, prohibición de humos visibles provenientes de las viviendas en horario nocturno y de la utilización de leña con un contenido superior de humedad al 25%, disminución de actividades deportivas al aire libre, entre otros, no responden de manera estructural a esta problemática socioambiental.</strong></p> <p>Los desafíos persisten y se hace necesario un mayor compromiso de los actores gubernamentales involucrados para lograr una mejora significativa en la calidad del aire. Es fundamental que el Estado adopte medidas concretas para reducir la emisión de contaminantes y conmine a las industrias a la mitigación de gases contaminantes, para proteger el medio ambiente y la salud. El llamado a las concientización de las personas para a evitar la calefacción a leña, no será suficiente, en tanto no se promuevan políticas efectivas de descontaminación que promuevan las transición a tecnologías de calefacción más limpias y asequibles a la población, garantizando un aire saludable para respirar.</p> <p>Vea aquí el Informe de (CR)2 antes mencionado, en el que se plantean causas, consecuencias y posibles soluciones, que continúan vigentes:<strong><a href="https://www.cr2.cl/contaminacion/">INFORME A LAS NACIONES / El aire que respiramos: pasado, presente y futuro</a> | </strong>Leer en <a href="https://www.elciudadano.com/actualidad/el-aire-que-respiramos-la-alarmante-crisis-ambiental-y-de-salud-publica-en-el-pais/06/03/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">El Ciudadano. </a></p> </div> </div> </div> </div> </div> </div> </div> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Estudios revelan el impacto ambiental de la minería en la región de Antofagasta desde los ’90 (Radio Bío-Bío)</title> <link>https://www.cr2.cl/estudios-revelan-el-impacto-ambiental-de-la-mineria-en-la-region-de-antofagasta-desde-los-90-radio-bio-bio/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Thu, 04 Apr 2024 19:52:31 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[contaminación minera]]></category> <category><![CDATA[estudios CR2]]></category> <category><![CDATA[metales pesados]]></category> <category><![CDATA[prensa nacional]]></category> <category><![CDATA[relaves]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=43793</guid> <description><![CDATA[El análisis detalla un aumento significativo en la presencia de metales nocivos para la salud desde la década del ’90, correlacionado con la expansión minera en el área. Investigaciones lideradas por la Universidad de Heidelberg y la Universidad de Chile lograron identificar un impacto ambiental extendido hasta 70 kilómetros en localidades de la región de Antofagasta debido […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>El análisis detalla un aumento significativo en la presencia de metales nocivos para la salud desde la década del ’90, correlacionado con la expansión minera en el área.</strong></p> <p>Investigaciones lideradas por la Universidad de Heidelberg y la Universidad de Chile lograron identificar un impacto ambiental extendido hasta 70 kilómetros en localidades de la región de <strong>Antofagasta </strong>debido al auge de la minería. El análisis de anillos de árboles y polvo acumulado en viviendas revela un aumento significativo en la presencia de metales desde la década del ’90, correlacionado con la expansión minera en el área.</p> <p>El estudio, publicado en la revista <a href="https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2024.170954" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Science of The Total Environment</a>, destaca la presencia de metales como antimonio y cadmio en los árboles, indicando un incremento desde la década de 1990 en el territorio indígena de Alto El Loa, coincidiendo con el boom minero impulsado por la demanda global de minerales.</p> <p><em>Cupressus macrocarpa</em>, conocida también como Ciprés de Monterrey, es una especie que fue introducida como árbol ornamental en todo el país durante la década de 1970 a través de un programa liderado por el Servicio Forestal de Chile, la actual Corporación Nacional Forestal (CONAF).</p> <p>Su plantación llegó a lugares como Alto El Loa, en la Región de Antofagasta, donde ha sido testigo del desarrollo minero de la zona, actividad que ha dejado huellas en sus anillos de crecimiento. Así lo revela un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Heidelberg y de la Universidad de Chile, publicado recientemente en la revista científica <a href="https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2024.170954" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Science of The Total Environment</a>.</p> <p><strong>Antimonio y cadmio</strong> son algunos de los metales potencialmente tóxicos descubiertos en los anillos de los árboles analizados en este trabajo. El estudio revela un incremento significativo y sostenido en la presencia de elementos tóxicos en el territorio indígena de Alto El Loa a partir de la década de 1990. Este aumento coincide con el “boom minero”, un periodo de explosivo desarrollo de la actividad extractiva en la zona, impulsado por la apertura económica del país, el crecimiento de China y el auge de la demanda global de minerales, especialmente potenciado por la revolución digital.</p> <p>Otra dimensión de este impacto, pero más centrada en el presente, es abordada en otro estudio publicado por este equipo en la revista<a href="https://doi.org/10.1016/j.envint.2022.107490" target="_blank" rel="noopener noreferrer"> Environment International</a>, el cual alerta sobre la presencia altas concentraciones de metales como <strong>arsénico, antimonio, cadmio, cobre, molibdeno, plata, plomo y azufre</strong> en el polvo recolectado en viviendas de la misma zona.</p> <p>A partir de estos estudios, los investigadores plantean una correlación directa entre la producción de cobre y la existencia de estos metales en concentraciones superiores a las que es posible encontrar de forma natural en el área.</p> <p>“Las correlaciones entre producción y presencia de metales en el ambiente son preocupantes. Nos encontramos en el umbral de una nueva revolución por metales para la descarbonización, pero nuestros resultados sugieren que el incremento proyectado (350% para el cobre) podría agravar el impacto: más emisiones de polvo rico en metales y mayor exposición para las comunidades. Las emisiones desde la superficie del relave también son un factor importante. Se necesitan medidas urgentes para evitar una profundización del conflicto y reevaluar prácticas como el secado de relaves para la recuperación de agua”, explica Nicolás Zanetta-Colombo, investigador de la Universidad de Heidelberg y autor principal del estudio.</p> <h2>Alcance de la contaminación</h2> <p>El estudio tuvo como referentes de producción de la zona de Alto El Loa a las faenas<strong> Chuquicamata, Radomiro Tomic, Ministro Hales y El Abra, </strong>así como al depósito de relaves <strong>Talabre</strong>, que abarca un área de 66 kilómetros cuadrados.</p> <p>La investigación, que también contó con la colaboración de Duncan Christie, académico de la Universidad Austral, y de Eugenia Gayó, académica de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la U. de Chile, contempló el análisis de muestras obtenidas desde localidades de la zona para evaluar el alcance de la minería a diferentes distancias desde las fuentes contaminantes, un trabajo que también incorporó a las comunidades locales.</p> <p>Carlos Manzano, académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile y coautor del estudio, destaca que estos trabajos revelan el impacto de la actividad minera a lo largo del tiempo y en una distancia mayor a la que se pensaba.</p> <p><strong>“Tenemos evidencia de que el impacto es mayor a lo que se sospechaba</strong>, incluso a 70 kilómetros de distancia, probablemente, por acción de los vientos. Hay registro de que eso se incrementa en la década de 1990, que coincide con el aumento en la producción de cobre, y se puede proyectar hacia el futuro para pensar, por ejemplo, qué va a pasar con el aumento de la demanda y producción de minerales ante el crecimiento de la electromovilidad y las energías limpias. Esto es algo deseable para nuestra economía, por cierto, pero es necesario mejorar el manejo de los contaminantes asociados a esta industria”, sostiene el investigador.</p> <p>El estudio de los anillos de los árboles, más allá de la escala temporal, complementa Nicolás Zanetta, muestra cómo la huella contaminante, tanto de los <em>open pits</em> como del relave de Talabre, llega a comunidades que están a 5 kilómetros de distancia y a cerca de 70 kilómetros.</p> <p>“La influencia de la actividad minera se manifiesta en ambas localidades, a pesar de estar separadas por una considerable distancia. Es evidente un efecto espacial de amplio alcance: en la localidad más alejada, la presencia minera se percibe de manera más atenuada, pero sigue siendo notable y significativa. Este fenómeno resalta la importancia del estudio, que revela el sorprendente alcance del transporte de polvo proveniente de estas dos fuentes. <strong>De hecho, la localidad más remota, lejos de ser una comunidad de control, también se ve expuesta a los impactos de la actividad minera”,</strong> señala.</p> <h2>Impacto ambiental y en la salud pública</h2> <p>La alta concentración de algunos metales identificados en la zona no solo tiene un gran impacto ambiental, <strong>también representa potenciales riesgos para la salud, como problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares e incluso cáncer.</strong></p> <p>En este sentido, ambos investigadores advierten la necesidad de realizar estudios que permitan evaluar los impactos en la salud a largo plazo de la exposición a contaminantes relacionados con la minería.</p> <p>El profesor Carlos Manzano precisa que uno de los objetivos de estos trabajos es dar cuenta de que, si bien en la matriz natural de la zona estos metales existen y su presencia es mayor en comparación a otros lugares del mundo, <strong>la concentración de metales tóxicos en el ambiente es muy superior a los niveles que se pueden encontrar naturalmente en este entorno.</strong></p> <p>En este sentido, sostiene que uno de los primeros desafíos asociados a este problema tiene relación con que no existe un análisis acabado de la presencia natural de metales en el ambiente y sus niveles base para tener mayor claridad, por ejemplo, de cuánto es exactamente el aporte contaminante de la industria en una zona como esta.</p> <p>En esta línea, Nicolás Zanetta enfatiza la necesidad de implementar regulaciones ambientales más estrictas y mejorar la gestión de los depósitos de relaves.</p> <p><strong>“Chile ostenta un lugar privilegiado en el panorama minero mundial. </strong>El cobre se ha convertido en un elemento central de nuestra identidad nacional. Sin embargo, existe una profunda disonancia entre este discurso y las medidas y regulaciones ambientales vigentes.<strong> Nos encontramos muy por debajo de lo necesario para proteger y mitigar los efectos adversos de esta industria crucial para el país. </strong>Es imperativo que el discurso de progreso e identidad cimentado en la minería impulse una transformación radical de nuestras leyes, regulaciones y decisiones, posicionándonos no solo como una potencia minera, sino también como un ejemplo en la protección de nuestro territorio y las comunidades que lo habitan, las cuales ya experimentan los impactos de la actividad extractiva en tiempo y espacio”, indica.</p> <p>Estas investigaciones, subraya Carlos Manzano, tienen el enfoque de mejorar la producción. <strong>“No es detener el progreso ni los ingresos económicos de Chile como país minero, sino hacer que sea más justo para todas y todos,</strong> que se mantenga este ingreso tan importante para el país, que seamos parte de la transición energética que está atravesando el mundo, pero haciendo las cosas bien desde el inicio. Para ello, es fundamental tener en cuenta los posibles efectos secundarios de esta actividad, que la ciencia tiene el deber de visibilizar”, agrega el investigador de la Universidad de Chile.</p> <p>Los desafíos asociados a lo que revelan estas investigaciones van de la mano con los compromisos ambientales asumidos por Chile y la preocupación global por un desarrollo sustentable. De hecho, el pasado viernes 15 de marzo la Unión Europea aprobó una ley que obligará a las empresas a demostrar que sus cadenas de suministro siguen prácticas medioambientales y laborales, y de respeto a los derechos humanos, una normativa que puede tener impacto en las exigencias al cobre y otros minerales exportados por nuestro país a Europa.</p> <p>Por lo mismo, recalcan la importancia de fortalecer la colaboración entre las empresas dedicadas a la minería, las agencias gubernamentales y las comunidades indígenas para desarrollar soluciones que protejan tanto la salud pública como el medio ambiente. | Leer en <a href="https://www.biobiochile.cl/especial/aqui-tierra/noticias/2024/04/02/estudios-revelan-el-impacto-ambiental-de-la-mineria-en-la-region-de-antofagasta-desde-los-90.shtml" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Radio Bío-Bío.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Descubren elevada concentración de metales tóxicos en árboles y viviendas del norte del país (InduAmbiente)</title> <link>https://www.cr2.cl/descubren-elevada-concentracion-de-metales-toxicos-en-arboles-y-viviendas-del-norte-del-pais-induambiente/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Tue, 02 Apr 2024 18:09:10 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[Contaminación]]></category> <category><![CDATA[metales pesados]]></category> <category><![CDATA[prensa nacional]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=43779</guid> <description><![CDATA[Dos estudios, liderados por investigadores de las universidades de Heidelberg y de Chile, identificaron allí alta presencia de antimonio, cadmio, arsénico y otros metales. Cupressus macrocarpa, conocida también como Ciprés de Monterrey, es una especie que fue introducida como árbol ornamental en todo el país durante la década de 1970. A través de un programa […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Dos estudios, liderados por investigadores de las universidades de Heidelberg y de Chile, identificaron allí alta presencia de antimonio, cadmio, arsénico y otros metales.</strong></p> <p>Cupressus macrocarpa, conocida también como Ciprés de Monterrey, es una especie que fue introducida como árbol ornamental en todo el país durante la década de 1970. A través de un programa liderado por el Servicio Forestal de Chile, la actual Corporación Nacional Forestal (Conaf), su plantación llegó a lugares como Alto El Loa, en la Región de Antofagasta, donde ha sido testigo del desarrollo minero de la zona, actividad que ha dejado huellas en sus anillos de crecimiento. Así lo revela un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Heidelberg y de la Universidad de Chile, publicado recientemente en la prestigiosa revista científica Science of The Total Environment.</p> <p>Antimonio y cadmio son algunos de los <strong>metales potencialmente tóxicos</strong> descubiertos en los anillos de los árboles analizados en este trabajo. El estudio revela un incremento significativo y sostenido en la presencia de <strong>elementos tóxicos</strong> en el territorio indígena de Alto El Loa a partir de la década de 1990. Este aumento coincide con el «boom minero», un periodo de explosivo desarrollo de la actividad extractiva en la zona, impulsado por la apertura económica del país, el crecimiento de China y el auge de la demanda global de minerales, especialmente potenciado por la revolución digital. Otra dimensión de este impacto, pero más centrada en el presente, es abordada en otro estudio publicado por este equipo en la revista Environment International, el cual alerta sobre la presencia altas concentraciones de metales como arsénico, antimonio, cadmio, cobre, molibdeno, plata, plomo y azufre en el polvo recolectado en viviendas de la misma zona.</p> <p>A partir de estos estudios, los investigadores plantean una correlación directa entre la producción de cobre y la existencia de estos metales en concentraciones superiores a las que es posible encontrar de forma natural en el área. «Las correlaciones entre producción y presencia de metales en el ambiente son preocupantes. Nos encontramos en el umbral de una nueva revolución por <strong>metales para la descarbonización</strong>, pero nuestros resultados sugieren que el incremento proyectado (350% para el cobre) podría agravar el impacto: más emisiones de polvo rico en metales y mayor exposición para las comunidades. Las emisiones desde la superficie del relave también son un factor importante. Se necesitan medidas urgentes para evitar una profundización del conflicto y reevaluar prácticas como el secado de relaves para la recuperación de agua», explica Nicolás Zanetta-Colombo, investigador de la Universidad de Heidelberg y autor principal del estudio.</p> <p><strong>Alcance de la contaminación</strong></p> <p>El estudio tuvo como referentes de producción de la zona de Alto El Loa a las faenas Chuquicamata, Radomiro Tomic, Ministro Hales y El Abra, así como al depósito de relaves Talabre, que abarca un área de 66 kilómetros cuadrados. La investigación, que también contó con la colaboración de Duncan Christie, académico de la Universidad Austral e investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2), contempló el análisis de muestras obtenidas desde localidades de la zona para evaluar el alcance de la actividad minera a diferentes distancias desde las <strong>fuentes contaminantes</strong>, un trabajo que también incorporó a las comunidades locales.</p> <p>Carlos Manzano, académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile y coautor de la investigación, destaca que estos estudios revelan el impacto de la actividad minera a lo largo del tiempo y en una distancia mayor a la que se pensaba. «Tenemos evidencia de que el impacto es mayor a lo que se sospechaba, incluso a 70 kilómetros de distancia probablemente por acción de los vientos. Hay registro de que eso se incrementa en la década de 1990, que coincide con el aumento en la producción de cobre, y se puede proyectar hacia el futuro para pensar, por ejemplo, qué va a pasar con el aumento de la demanda y producción de minerales ante el crecimiento de la electromovilidad y las energías limpias. Esto es algo deseable para nuestra economía, por cierto, pero es necesario mejorar el manejo de los <strong>contaminantes asociados a esta industria</strong>«, sostiene el investigador.</p> <p>El estudio de los anillos de los árboles, más allá de la escala temporal, complementa Nicolás Zanetta, muestra cómo la <strong>huella contaminante</strong>, tanto de los open pits como del relave de Talabre, llega a comunidades que están a 5 kilómetros de distancia y a cerca de 70 kilómetros. «La influencia de la minería se ve en ambas localidades, que están muy distantes unas de otras, pero podemos ver que hay un efecto espacial de amplio alcance, porque en la que está más lejos la curva es un poco más suavizada, pero está muy presente, es muy visible. Por eso el estudio termina siendo significativo, porque también nos sorprendemos del alcance que tiene el transporte de polvo potencialmente de estas dos fuentes. Caspana, en vez de ser una comunidad de control, también terminó siendo una comunidad expuesta», señala.</p> <p><strong>Impacto ambiental y en la salud pública</strong></p> <p>La alta concentración de algunos metales identificados en la zona no solo tiene un <strong>gran impacto ambiental</strong>. También representa potenciales riesgos para la salud, como problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares e incluso cáncer. En este sentido, ambos investigadores advierten la necesidad de realizar estudios que permitan evaluar los impactos en la salud a largo plazo de la exposición a contaminantes relacionados con la minería.</p> <p>El profesor Carlos Manzano precisa que uno de los objetivos del estudio es dar cuenta de que, si bien en la matriz natural de la zona estos metales existen y su presencia es mayor en comparación a otras zonas del mundo, la concentración de <strong>metales tóxicos</strong> en el ambiente es muy superior a los niveles que se pueden encontrar naturalmente en este ambiente. En este sentido, sostiene que uno de los primeros desafíos asociados a este problema tiene relación con que no existe un análisis acabado de la presencia natural de metales en el ambiente y sus niveles base para tener mayor claridad, por ejemplo, de cuánto es el aporte contaminante de la industria en una zona como esta.</p> <p>En esta línea, Nicolás Zanetta enfatiza la necesidad de implementar regulaciones ambientales más estrictas y mejorar la gestión de los depósitos de relaves. «Chile ostenta un lugar privilegiado en el panorama minero mundial. El cobre se ha convertido en un elemento central de nuestra identidad nacional. Sin embargo, existe una profunda disonancia entre este discurso y las medidas y regulaciones ambientales vigentes. Nos encontramos muy por debajo de lo necesario para proteger y mitigar los efectos adversos de esta industria crucial para el país. Es imperativo que el discurso de progreso e identidad cimentado en la minería impulse una transformación radical de nuestras leyes, regulaciones y decisiones, posicionándonos no solo como una potencia minera, sino también como un ejemplo en la protección de nuestro territorio y las comunidades que lo habitan, las cuales ya experimentan los impactos de la actividad extractiva en tiempo y espacio.», indica.</p> <p>Estas investigaciones, subraya Carlos Manzano, tienen el enfoque de mejorar la producción. «No es detener el progreso ni los ingresos económicos de Chile como país minero, sino hacer que sea más justo para todas y todos, que se mantenga este ingreso tan importante para el país, que seamos parte de la transición energética que está atravesando el mundo, pero haciendo las cosas bien desde el inicio. Para ello, es fundamental tener en cuenta los posibles efectos secundarios de esta actividad, que la ciencia tiene el deber de visibilizar», agrega el investigador de la Universidad de Chile.</p> <p>Los desafíos asociados a lo que revelan estas investigaciones van de la mano con los <strong>compromisos ambientales</strong> asumidos por Chile y la preocupación global por un desarrollo sustentable. De hecho, el pasado viernes 15 de marzo la Unión Europea aprobó una ley que obligará a las empresas a demostrar que sus cadenas de suministro siguen prácticas medioambientales y laborales, y de respeto a los derechos humanos, una normativa que puede tener impacto en las exigencias al cobre y otros minerales exportados por nuestro país a Europa. Por lo mismo, indican la importancia de fortalecer la colaboración entre las empresas mineras, las agencias gubernamentales y las comunidades indígenas para desarrollar soluciones que protejan tanto la salud pública como el medio ambiente. | Leer en <a href="https://www.induambiente.com/descubren-elevada-concentracion-de-metales-toxicos-en-arboles-y-viviendas-del-norte-del-pais" target="_blank" rel="noopener noreferrer">InduAmbiente.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Arsénico, plomo, azufre: descubren alta concentración de metales tóxicos en casas y árboles del norte del país (La Tercera)</title> <link>https://www.cr2.cl/arsenico-plomo-azufre-descubren-alta-concentracion-de-metales-toxicos-en-casas-y-arboles-del-norte-del-pais-la-tercera/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 01 Apr 2024 11:59:14 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Agua y Extremos]]></category> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[Contaminación]]></category> <category><![CDATA[duncan christie]]></category> <category><![CDATA[Eugenia Gayó]]></category> <category><![CDATA[metales pesados]]></category> <category><![CDATA[Zoe Fleming]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=43733</guid> <description><![CDATA[Dos estudios paralelos revelaron la huella de metales tóxicos que ha dejado en el ambiente el auge de la minería desde 1990 en adelante, dejando una preocupante arista asociada al impacto en la salud humana. Cupressus macrocarpa, conocida también como Ciprés de Monterrey, es una especie que fue introducida como árbol ornamental en todo el país durante […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong>Dos estudios paralelos revelaron la huella de metales tóxicos que ha dejado en el ambiente el auge de la minería desde 1990 en adelante, dejando una preocupante arista asociada al impacto en la salud humana.</strong></p> <p class="paragraph "><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cupressus_macrocarpa" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><i>Cupressus macrocarpa</i></a>, conocida también como Ciprés de Monterrey, <b>es una especie que fue introducida como árbol ornamental </b>en todo el país durante la década de 1970.</p> <p class="paragraph ">A través de un programa liderado por el Servicio Forestal de Chile, la actual <a href="https://www.conaf.cl/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Corporación Nacional Forestal (Conaf)</a>, su plantación llegó a lugares como Alto El Loa, en la Región de Antofagasta, donde <b>ha sido testigo del desarrollo minero de la zona, actividad que ha dejado huellas en sus anillos de crecimiento.</b></p> <p class="paragraph ">Así lo revela un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Heidelberg y de la Universidad de Chile, publicado recientemente en la revista científica <a href="https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2024.170954"><i>Science of The Total Environment</i></a><i>. </i>Entre los metales potencialmente tóxicos descubiertos en los anillos de los árboles analizados en este trabajo se encuentran <b>antimonio y cadmio, metales que son potencialmente tóxicos.</b></p> <p class="paragraph ">El estudio revela un incremento significativo y sostenido en la presencia de elementos tóxicos en el territorio indigena de Alto El Loa a partir de la década de 1990. <b>Este aumento coincide con el “boom minero”, un periodo de explosivo desarrollo de la actividad extractiva en la zona,</b> impulsado por la apertura económica del país, el crecimiento de China y el auge de la demanda global de minerales, especialmente potenciado por la revolución digital.</p> <p class="paragraph ">Otra dimensión de este impacto, pero más centrada en el presente, es abordada en otro estudio publicado por este equipo en la revista <a href="https://doi.org/10.1016/j.envint.2022.107490"><i>Environment International</i></a><i>,</i> el cual alerta sobre la presencia <b>altas concentraciones de metales como arsénico, antimonio, cadmio, cobre, molibdeno, plata, plomo y azufre en el polvo recolectado en viviendas de la misma zona.</b></p> <p class="paragraph ">A partir de estos estudios, los investigadores plantean una <b>correlación directa entre la producción de cobre y la existencia de estos metales en concentraciones superiores a las que es posible encontrar de forma natural en el área.</b> “Las correlaciones entre producción y presencia de metales en el ambiente son preocupantes. Nos encontramos en el umbral de una nueva revolución por metales para la descarbonización, pero nuestros resultados sugieren que el incremento proyectado (350% para el cobre) podría agravar el impacto: más emisiones de polvo rico en metales y mayor exposición para las comunidades.</p> <p class="paragraph ">Las emisiones desde la superficie del relave también son un factor importante. <b>Se necesitan medidas urgentes para evitar una profundización del conflicto y reevaluar prácticas como el secado de relaves para la recuperación de agua</b>”, explica Nicolás Zanetta-Colombo, investigador de la Universidad de Heidelberg y autor principal del estudio.</p> <div class="header | hl"> <h3><b>Alcance de la contaminación</b></h3> <div></div> </div> <p class="paragraph ">El estudio tuvo como referentes de producción de la <b>zona de Alto El Loa</b> a las faenas <b>Chuquicamata, Radomiro Tomic, Ministro Hales y El Abra</b>, así como al depósito de relaves Talabre, que abarca un área de 66 kilómetros cuadrados. La investigación, que también contó con la colaboración de <b>Duncan Christie, académico de la Universidad Austral e investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2)</b>, contempló el análisis de muestras obtenidas desde las localidades de Lasana y Caspana para evaluar el alcance de la actividad minera a diferentes distancias desde las fuentes contaminantes, un trabajo que también incorporó a las comunidades locales.</p> <p><b>Carlos Manzano, académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile y coautor del estudio,</b> destaca que estos estudios revelan el impacto de la actividad minera a lo largo del tiempo y en una distancia mayor a la que se pensaba. “Tenemos evidencia de que <b>el impacto es mayor a lo que se sospechaba</b>, incluso a 70 kilómetros de distancia probablemente por acción de los vientos”, comenta.</p> <p class="paragraph "><b>“Hay registro de que eso se incrementa en la década de 1990, que coincide con el aumento en la producción de cobre</b>, y se puede proyectar hacia el futuro para pensar, por ejemplo, qué va a pasar con el aumento de la demanda y producción de minerales ante el crecimiento de la electromovilidad y las energías limpias. Esto es algo deseable para nuestra economía, por cierto, pero es necesario mejorar el manejo de los contaminantes asociados a esta industria”, sostiene el investigador.</p> <p class="paragraph ">El estudio de los anillos de los árboles, más allá de la escala temporal, complementa Nicolás Zanetta, muestra <b>cómo la huella contaminante, tanto de los open pits como del relave de Talabre, llega a comunidades que están a 5 kilómetros</b> de distancia y a cerca de 70 kilómetros.</p> <p class="paragraph "><b>“La influencia de la minería se ve en ambas localidades, que están muy distantes unas de otras</b>, pero podemos ver que hay un efecto espacial de amplio alcance, porque en la que está más lejos la curva es un poco más suavizada, pero está muy presente, es muy visible. Por eso el estudio termina siendo significativo, porque también <b>nos sorprendemos del alcance que tiene el transporte de polvo potencialmente de estas dos fuentes. </b>Caspana, en vez de ser una comunidad de control, también terminó siendo una comunidad expuesta”, señala.</p> <div class="header | hl"> <h3><b>Impacto ambiental y en la salud pública</b></h3> <div></div> </div> <p class="paragraph ">La alta concentración de algunos metales identificados en la zona <b>no solo tiene un gran impacto ambiental, también representa potenciales riesgos para la salud</b>, como problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares e incluso cáncer. En este sentido, ambos investigadores advierten la necesidad de realizar estudios que permitan <b>evaluar los impactos en la salud a largo plazo de la exposición</b> a contaminantes relacionados con la minería.</p> <p class="paragraph ">El profesor Carlos Manzano precisa que uno de los objetivos del estudio es dar cuenta de que, si bien en la matriz natural de la zona estos metales existen y su presencia es mayor en comparación a otras zonas del mundo, la concentración de metales tóxicos en el ambiente es muy superior a los niveles que se pueden encontrar naturalmente en este ambiente.</p> <p class="paragraph ">En este sentido, sostiene que uno de los primeros desafíos asociados a este problema tiene relación con que <b>no existe un análisis acabado de la presencia natural de metales en el ambiente</b> y sus niveles base para tener mayor claridad, por ejemplo, de cuánto es el aporte contaminante de la industria en una zona como esta.</p> <p class="paragraph ">En esta línea, Nicolás Zanetta enfatiza la necesidad de <b>implementar regulaciones ambientales más estrictas y mejorar la gestión de los depósitos de relaves.</b> “Chile ostenta un lugar privilegiado en el panorama minero mundial. El cobre se ha convertido en un elemento central de nuestra identidad nacional. Sin embargo, existe una profunda disonancia entre este discurso y las medidas y regulaciones ambientales vigentes. Es imperativo que el <b>discurso de progreso e identidad cimentado en la minería impulse una transformación radical de nuestras leyes, regulaciones y decisiones</b>, posicionándonos no solo como una potencia minera, sino también como un ejemplo en la protección de nuestro territorio y las comunidades que lo habitan, las cuales ya experimentan los impactos de la actividad extractiva en tiempo y espacio.”, indica.</p> <p>Estas investigaciones, subraya Carlos Manzano, tienen el enfoque de mejorar la producción. “<b>No es detener el progreso ni los ingresos económicos de Chile como país minero, sino hacer que sea más justo para todas y todos, que se mantenga este ingreso tan importante para el país, que seamos parte de la transición energética que está atravesando el mundo, pero haciendo las cosas bien desde el inicio.</b> Para ello, es fundamental tener en cuenta los posibles efectos secundarios de esta actividad, que la ciencia tiene el deber de visibilizar”, agrega el investigador de la Universidad de Chile.</p> <p>Los desafíos asociados a lo que revelan estas investigaciones van de la mano con los <b>compromisos ambientales asumidos por Chile y la preocupación global por un desarrollo sustentable.</b> De hecho, el pasado viernes 15 de marzo la Unión Europea aprobó una <a href="https://es.euronews.com/my-europe/2024/03/15/luz-verde-de-los-paises-de-la-ue-a-la-ley-para-una-cadena-de-suministro-mas-justa">ley que obligará a las empresas a demostrar que sus cadenas de suministro siguen prácticas medioambientales y laborales, y de respeto a los derechos humanos</a>, una normativa que puede tener impacto en las exigencias al cobre y otros minerales exportados por nuestro país a Europa. Por lo mismo, indican la importancia de <b>fortalecer la colaboración entre las empresas mineras, las agencias gubernamentales y las comunidades indígenas</b> para desarrollar soluciones que protejan tanto la salud pública como el medio ambiente. | Leer en <a href="https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/arsenico-plomo-azufre-descubren-alta-concentracion-de-metales-toxicos-en-casas-y-arboles-del-norte-del-pais/JXMKFJDYARAFNKE2F5KFS6LZL4/#" target="_blank" rel="noopener noreferrer">La Tercera.</a></p> ]]></content:encoded> </item> <item> <title>Policy brief CR2 | Los desafíos ante la contaminación atmosférica en la bahía de Quintero-Puchuncaví</title> <link>https://www.cr2.cl/policy-brief-cr2-los-desafios-ante-la-contaminacion-atmosferica-en-la-bahia-de-quintero-puchuncavi/</link> <dc:creator><![CDATA[Jose Barraza]]></dc:creator> <pubDate>Mon, 18 Dec 2023 18:48:53 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Ciudades resilientes]]></category> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Policy briefs]]></category> <category><![CDATA[contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Contaminación Quintero Puchunaví]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=42597</guid> <description><![CDATA[Por Rodrigo Seguel, investigador Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2 Desde 1955 se han concentrado diversas actividades productivas en la zona de Quintero-Puchuncaví, que han generado saturación por material particulado fino e impactos en la salud humana Un estudio realizado por el CR2 evidenció que ciertos compuestos orgánicos volátiles emitidos por los […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<div class="wpb-content-wrapper"><p><strong><em>Por Rodrigo Seguel, investigador Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2</em></strong></p> <ul> <li>Desde 1955 se han concentrado diversas actividades productivas en la zona de Quintero-Puchuncaví, que han generado saturación por material particulado fino e impactos en la salud humana</li> <li>Un estudio realizado por el CR2 evidenció que ciertos compuestos orgánicos volátiles emitidos por los procesos industriales de la zona están asociados a malestares experimentados por residentes de Quintero</li> <li>El polo industrial no es el único responsable de los episodios de contaminación, ya que las emisiones de otras fuentes industriales, ubicadas al sur de la bahía, pueden llegar hasta Quintero debido al viento</li> </ul> <div class="vc_row wpb_row td-pb-row"><div class="wpb_column vc_column_container td-pb-span12"><div class="vc_column-inner "><div class="wpb_wrapper"><div class="vc_btn3-container vc_btn3-left vc_do_btn" ><a class="vc_general vc_btn3 vc_btn3-size-md vc_btn3-shape-square vc_btn3-style-flat vc_btn3-icon-left vc_btn3-color-primary" href="#recomendaciones" title=""><i class="vc_btn3-icon fa fa-handshake-o"></i> Leer recomendaciones para la política pública</a></div></div></div></div></div><div class="vc_row wpb_row td-pb-row"><div class="wpb_column vc_column_container td-pb-span6"><div class="vc_column-inner "><div class="wpb_wrapper"><div class="vc_btn3-container vc_btn3-left vc_do_btn" ><a class="vc_general vc_btn3 vc_btn3-size-md vc_btn3-shape-square vc_btn3-style-flat vc_btn3-block vc_btn3-icon-left vc_btn3-color-primary" href="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Policy-brief-Los-desafíos-ante-la-contaminación-atmosférica-en-la-bahía-de-Quintero-Puchuncaví.pdf" title=""><i class="vc_btn3-icon fa fa-file-pdf-o"></i> Descargar policy brief </a></div></div></div></div> <p> </p> <p> </p> <p>Las zonas contaminadas por alta concentración industrial, también conocidas como zonas de sacrificio, imponen enormes desafíos sociales y representan un tema no resuelto en Chile y a nivel mundial. Una de estas áreas es la bahía de Quintero-Puchuncaví, que desde 1955 ha concentrado diversas actividades relacionadas a la fundición de cobre, generación de energía, y almacenamiento y distribución de combustibles y productos químicos. Como resultado, la zona de Concón-Quintero-Puchuncaví, actualmente se encuentra saturada por material particulado fino (MP2.5) y ha experimentado episodios dramáticos para la salud humana asociados a compuestos azufrados como el dióxido de azufre (SO2). Además, en los últimos años se han sumado eventos relacionados a la industria de combustibles líquidos y gaseosos.</p> <p>En esta bahía, los instrumentos de gestión ambiental disponibles no han logrado reducir la exposición de la población a contaminantes atmosféricos peligrosos de manera eficaz. Sin ir más lejos, en lo que va del año 2023 se han reportado 728 consultas médicas por síntomas asociados a la presencia de hidrocarburos en el aire (Ministerio de Salud, 2023). A modo de ejemplo, en mayo de este año se registraron 177 casos tras elevados niveles de hidrocarburos no metánicos (NMHC) que alcanzaron 6 mil partes por billón en la atmósfera de Quintero, es decir, más de 70 veces el valor promedio de la ciudad en 2023.</p> <p>En este sentido, se debe recordar que en respuesta a las intoxicaciones masivas de 2018 que causaron 1370 atenciones de urgencia (Ministerio de Salud, 2018), el Ministerio del Medio Ambiente promulgó este año la norma primaria de calidad del aire<a href="#_ftn1" name="_ftnref1">[1]</a> para el compuesto orgánico volátil benceno (Ministerio del Medio Ambiente, 2023), cuyo objetivo es proteger la salud de la población respecto de la exposición a este contaminante cancerígeno que, además, afecta al sistema inmune.</p> <p>Por lo tanto, la zona de Concón-Quintero-Puchuncaví enfrenta diversos desafíos que incluyen la implementación y actualización de este tipo de instrumentos de gestión de gran importancia para la comunidad, cuya credibilidad depende, en parte, de las estructuras de gobernanza y participación efectiva de los actores. En la actualidad, estos instrumentos de gestión ambiental son la nueva Red de Monitoreo de Calidad del Aire para las Comunas de Concón, Quintero y Puchuncaví, la implementación de la norma primaria de calidad de aire para el compuesto orgánico volátil benceno y la red de alerta temprana del polo industrial Quintero-Puchuncaví.</p> <p>En este contexto, el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2 puso a disposición de la comunidad sus capacidades científicas y tecnológicas para contribuir a la comprensión de los episodios de calidad de aire asociados a compuestos orgánicos volátiles (COVs) que afectan a la ciudad de Quintero. Para ello se realizaron campañas de mediciones en periodos de invierno y verano en el año 2022 con el objetivo de estudiar contaminantes atmosféricos no regulados y los regímenes meteorológicos que influyen en la ocurrencia de episodios de contaminación atmosférica en la bahía de Quintero-Puchuncaví. A continuación, se presentan los principales hallazgos, conclusiones y recomendaciones de esta campaña.</p> <p><strong>Conclusiones</strong></p> <p>La evidencia científica recogida durante la primera parte del estudio (campaña de verano), realizada entre el 4 y 28 de enero de 2022, permitió demostrar que ciertos COVs emitidos por procesos industriales de petróleo y gas en la zona de Concón-Quintero-Puchuncaví, están asociados a malestares experimentados por las y los residentes de Quintero.</p> <p>En términos generales, Quintero experimentó buena calidad de aire durante el mes de enero. Sin embargo, esta condición favorable fue interrumpida por elevados niveles de COVs medidos en tiempo real:</p> <ul> <li>Altos niveles de COVs livianos (propeno/ciclopropano, butenos) y aromáticos (benceno, tolueno y etilbenceno/xilenos) emitidos desde unidades de procesamiento de petróleo y gas, bajo vientos débiles del norte y noroeste (es decir, procedentes de la bahía), impactaron Quintero, lo cual causó quejas por olores molestos (Figura 1).</li> <li>Altos niveles de COVs oxigenados (fenol, furano y cresoles) bajo un viento fuerte desde el suroeste también impactaron a ciudad de Quintero. En este caso, los síntomas incluyeron dolor de cabeza y mareo (Figura 2).</li> <li>El polo industrial ubicado en la bahía no es la única fuente responsable de los episodios de contaminación. En este sentido, fuentes industriales ubicadas al sur de Quintero también pueden transportar masas de aire contaminado debido al viento predominante desde el sur.</li> </ul> <p style="text-align: center;"><a href="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1.jpg"><img fetchpriority="high" decoding="async" class=" td-modal-image aligncenter wp-image-42606 size-large" src="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-1024x323.jpg" alt="" width="696" height="220" srcset="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-1024x323.jpg 1024w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-300x95.jpg 300w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-768x242.jpg 768w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-723x228.jpg 723w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-696x219.jpg 696w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-1068x337.jpg 1068w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-1332x420.jpg 1332w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-1-1920x605.jpg 1920w" sizes="(max-width: 696px) 100vw, 696px" /></a></p> <p style="text-align: center;"><em><b>Figura 1</b>. Serie de tiempo de COVs correspondiente al evento del 11 de enero de 2022 (en minutos promediados a partir de mediciones de un segundo). El panel de la izquierda muestra COVs ligeros y el de la derecha COVs aromáticos. Fuente: Elaboración propia.</em></p> <p><a href="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2.jpg"><img decoding="async" class=" td-modal-image aligncenter wp-image-42608" src="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-300x199.jpg" alt="" width="400" height="265" srcset="https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-300x199.jpg 300w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-768x508.jpg 768w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-1024x678.jpg 1024w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-344x228.jpg 344w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-696x461.jpg 696w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-1068x707.jpg 1068w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2-635x420.jpg 635w, https://www.cr2.cl/wp-content/uploads/2023/12/Figura-2.jpg 1254w" sizes="(max-width: 400px) 100vw, 400px" /></a></p> <p style="text-align: center;"><em><strong>Figura 2.</strong> Serie de tiempo de COVs oxigenados correspondiente al evento del 18-19 de enero de 2022 (en minutos promediados a partir de mediciones de un segundo). Fuente: Elaboración propia.</em></p> <p></div><div class="vc_row wpb_row td-pb-row vc_custom_1638802241871 vc_row-has-fill"><div class="wpb_column vc_column_container td-pb-span12"><div class="vc_column-inner "><div class="wpb_wrapper"> <div class="wpb_text_column wpb_content_element" > <div class="wpb_wrapper"> <h5 id="recomendaciones"><strong>Recomendaciones </strong></h5> <ol> <li>Mantener un registro de los COVs coidentificados en el análisis rutinario de benceno realizado por la red de monitoreo. Esto con el objetivo de suministrar información relevante para la posterior revisión de la norma nacional de benceno realizada cada cuatro años.</li> <li>Determinar si los niveles de alerta, premergencia y emergencia establecidos en la norma de benceno son adecuados para proteger a la población frente a la exposición de COVs.</li> <li>Incentivar la colaboración entre instituciones del Estado, la academia y del sector privado a través de la articulación de ejercicios de intercomparación de métodos basados en monitoreo continuo y discreto a escala de laboratorio y de campo. Esto con el fin de evaluar, mejorar y desarrollar tecnologías ambientales relacionadas a COVs que aseguren información de calidad.</li> <li>Evaluar la consistencia entre los niveles ambientales de COVs y los inventarios de emisión en la zona de Concón-Quintero-Puchuncaví con el objetivo de mitigar mediante el control focalizado de emisiones.</li> <li>Optimizar la configuración de la red de monitoreo de Concón-Quintero-Puchuncaví de acuerdo con el complejo patrón de circulación del viento y transporte de contaminantes observado en la zona.</li> <li>Incorporar mediciones de largo plazo de otros trazadores orgánicos no regulados con el fin de garantizar la transparencia y escrutinio público.<br /> </div> </div> </div></div></div></div><div class="vc_row wpb_row td-pb-row"></div><div class="wpb_column vc_column_container td-pb-span12"><div class="vc_column-inner "><div class="wpb_wrapper"></div></div></div> <div class="wpb_text_column wpb_content_element" > <div class="wpb_wrapper"> </div> </div> </li> </ol> <h5><strong>Notas</strong></h5> <p><a href="#_ftnref1" name="_ftn1">[1]</a> Las normas primarias de calidad del aire son los principales instrumentos de política pública que permiten proteger a la salud de la población frente a contaminantes atmosféricos al posibilitar la declaración de zonas saturadas o en latencia de manera objetiva. Además, dicha declaración permite posteriormente diseñar Planes de Prevención o Descontaminación.</p> <h5><strong>Referencias</strong></h5> <p>Decreto 83 de 2018 [Ministerio de Salud]. Decreta alerta sanitaria por el periodo que se señala y otorga facultades extraordinarias que indica. 27 de septiembre de 2018. <a href="https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1123413">https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1123413</a></p> <p>Decreto 83 de 2023 [Ministerio de Salud]. Decreta alerta sanitaria por el periodo que se señala y otorga facultades extraordinarias que indica. 27 de mayo de 2023. <a href="https://www.bcn.cl/leychile/navegar?i=1192650">https://www.bcn.cl/leychile/navegar?i=1192650</a></p> <p>Decreto 15 de 2023. [Ministerio de Medio Ambiente]. Establece norma primaria de calidad del aire para el compuesto orgánico volátil Benceno. 11 de mayo de 2023. <a href="https://www.bcn.cl/leychile/navegar?i=1192010">https://www.bcn.cl/leychile/navegar?i=1192010</a></p> </div>]]></content:encoded> </item> <item> <title>El aporte del programa Huella Chile en el camino hacia la descarbonización (Diario Financiero)</title> <link>https://www.cr2.cl/el-aporte-del-programa-huella-chile-en-el-camino-hacia-la-descarbonizacion-diario-financiero/</link> <dc:creator><![CDATA[Michael]]></dc:creator> <pubDate>Tue, 24 Oct 2023 17:48:16 +0000</pubDate> <category><![CDATA[Contaminación atmosférica]]></category> <category><![CDATA[Noticias]]></category> <category><![CDATA[(CR)2 en la prensa]]></category> <category><![CDATA[Huella Chile]]></category> <category><![CDATA[Mauricio Osses]]></category> <guid isPermaLink="false">https://www.cr2.cl/?p=41707</guid> <description><![CDATA[Desde su creación en 2013, el programa ha registrado sobre 2.270 instituciones, otorgando sellos de reconocimiento a aquellas que han logrado cuantificar, reducir o neutralizar sus emisiones. La quema de combustibles fósiles genera emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que, a su vez, generan una capa alrededor del planeta, atrapando el calor y aumentando […]]]></description> <content:encoded><![CDATA[<p><strong> Desde su creación en 2013, el programa ha registrado sobre 2.270 instituciones, </strong><strong>otorgando sellos de reconocimiento a aquellas que han logrado cuantificar, reducir o neutralizar sus emisiones.</strong></p> <p>La quema de combustibles fósiles genera emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que, a su vez, generan una capa alrededor del planeta, atrapando el calor y aumentando la temperatura. Este proceso es el principal motor del cambio climático, uno de los desafíos ambientales más urgentes en todo el mundo.</p> <p>Para frenarlo, muchos países han tomado diversas acciones, con resultados variados. En el caso chileno, el Estado ha planteado la meta de lograr la carbono neutralidad para 2050, para lo que resulta vital involucrar al sector privado, principalmente mediante su participación en programas voluntarios de gestión del carbono, como<br /> el programa HuellaChile.</p> <p>Esta iniciativa, que fue creada en 2013 por el Ministerio de Medio Ambiente (MMA), ha<br /> conseguido registrar a más de 2.270 instituciones, tanto del sector público como del privado. A la fecha ha otorgado más de 1.370 sellos de reconocimiento como parte de sus logros, de los cuales un 90% corresponde a cuantificación, 7% a reducción, 1% a neutralización y 2% a excelencia.<br /> Desde el programa Huella Chile explican que las organizaciones “pueden respaldar<br /> su progreso en la gestión del carbono mediante un sistema estandarizado de Monitoreo, Reporte y Verificación (MRV), que es transparente y que está en línea con la normativa en las declaraciones de gases de efecto invernadero a nivel de organizaciones, eventos y comunas”.</p> <h3>El impacto</h3> <p>Mauricio Osses, investigador adjunto de la línea Ciudades Resilientes del CR2, valora los logros de esta iniciativa, ya que la gestión efectiva de las emisiones de GEI y la reducción de la huella de carbono son esenciales para la conservación del medio ambiente, por lo que es clave contar con acciones coordinadas a nivel mundial<br /> y desde los sectores público y privado.<br /> “El sector público debe abordar este proceso por ley, atendiendo a la Ley Marco de<br /> Cambio Climático y la Estrategia Climática de Largo Plazo, generando planes de adaptación y mitigación desde los distintos ministerios y sectores productivos. Las empresas asumen su responsabilidad corporativa y social al reducir su impacto ambiental, lo que es crucial para mantener la confianza de los consumidores<br /> y accionistas, cumplir con las regulaciones gubernamentales sobre emisiones de carbono y obtener ventajas competitivas en mercados internacionales que exigen cumplimiento de estándares ambientales”, expresa Osses.</p> <p>A lo anterior, Diego González Santander, investigador del Centro de Cambio Global UC,<br /> añade que actualmente este tipo de mediciones permite a los privados acceder a nuevas oportunidades de inversión, ya que tanto los mercados internacionales como las grandes empresas están exigiendo informes de emisión de GEI para entrar en ellos.<br /> “Las empresas pueden mostrar un sello diferenciador y motivador, haciendo que otras<br /> firmas también se suban al carro para cuantificar y reducir sus emisiones. De esta misma forma, empresas que estén midiendo su alcance 3 de emisiones de GEI pueden exigir a sus pro veedores que disminuyan sus emisiones, o buscar nuevos proveedores con una huella de carbono menor, aumentando la competencia de prácticas de mitigación de emisiones de GEI”, reflexiona González.</p> <p>Para Daniela Bertoglia, gerenta de Sostenibilidad Corporativa de Falabella S.A., tanto el retail como otros sectores tienen un desafío relevante en la gestión de sus categorías de alcance 3 (es decir, aquellas emisiones indirectas de la compañía, como el transporte de los colaboradores y/o de insumos o viajes por motivos de trabajo,<br /> entre otros) y en conectar con otras compañías a lo largo de la cadena de valor para generar sinergias. También reconoce que existe un espacio para que las empresas más grandes aporten en la instalación de conocimiento y capacidades de las más pequeñas, partiendo por sus propios proveedores.<br /> “Aquellas empresas que toman la delantera y demuestran un liderazgo claro en materia<br /> de sostenibilidad no solo se con vierten en empresas más competitivas frente al mercado, sino que pasan a generar un círculo virtuoso de buenas prácticas a<br /> lo largo de la cadena de valor, donde el objetivo final es lograr negocios resilientes y un mejor futuro para el planeta y todas las personas”, indica la ejecutiva de Falabella, grupo que ha lo grado el reconocimiento de sus diversas unidades de negocio<br /> por HuellaChile, como Sodimac, con el sello de Excelencia y los de Cuantificación y Reducción de GEI, y Falabella Retail, con los sellos de Cuantificación y<br /> Reducción.</p> ]]></content:encoded> </item> </channel> </rss>