{"id":22188,"date":"2019-08-26T16:50:43","date_gmt":"2019-08-26T20:50:43","guid":{"rendered":"http:\/\/www.cr2.cl\/?p=22188"},"modified":"2019-10-23T18:11:32","modified_gmt":"2019-10-23T21:11:32","slug":"policy-brief-observatorio-ley-de-cambio-climatico-reflexiones-sobre-el-proceso-de-discusion-del-anteproyecto-de-ley-marco-de-cambio-climatico-y-la-participacion-publica","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.cr2.cl\/policy-brief-observatorio-ley-de-cambio-climatico-reflexiones-sobre-el-proceso-de-discusion-del-anteproyecto-de-ley-marco-de-cambio-climatico-y-la-participacion-publica\/","title":{"rendered":"Policy brief Observatorio Ley de Cambio Clim\u00e1tico: Reflexiones sobre el proceso de discusi\u00f3n del anteproyecto de Ley Marco de Cambio Clim\u00e1tico y la participaci\u00f3n p\u00fablica"},"content":{"rendered":"<p><strong>Guadalupe Jim\u00e9nez,<\/strong>\u00a0Asistente de investigaci\u00f3n de la l\u00ednea GOVSPI (CR)2<br \/>\n<strong>B\u00e1rbara Morales,<\/strong>\u00a0Encargada de Di\u00e1logo e Interdisciplina(CR)2<br \/>\n<strong>Ignacio Neira,<\/strong> Estudiante de Mag\u00edster en An\u00e1lisis Sist\u00e9mico Aplicado a la Sociedad (U. de Chile)<br \/>\n<strong>Anah\u00ed Urquiza,<\/strong>\u00a0Acad\u00e9mica FACSO, U. de Chile e Investigadora (CR)2<\/p>\n<p>Desde fines de noviembre de 2018 hasta enero de 2019, el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) llev\u00f3 a cabo un proceso de di\u00e1logo y participaci\u00f3n ciudadana temprana para la construcci\u00f3n del anteproyecto de Ley Marco de Cambio Clim\u00e1tico. Este proceso contempl\u00f3 dos tipos de di\u00e1logos: los di\u00e1logos ciudadanos regionales, que cubrieron las 16 regiones del pa\u00eds<a href=\"#_ftn1\" name=\"_ftnref1\"><sup>[1]<\/sup><\/a>, logrando un promedio cercano a las 50 personas por encuentro y con un porcentaje equilibrado desde la perspectiva de g\u00e9nero, aunque con una importante sobrerrepresentaci\u00f3n del sector p\u00fablico (ver Tabla N\u00b01); y los di\u00e1logos ciudadanos sectoriales (dos en total), que fueron realizados en Santiago y que convocaron a expertos provenientes de la sociedad civil, academia, sector p\u00fablico y privado. Si bien no hay registros oficiales disponibles sobre el n\u00famero de participantes de estos \u00faltimos, se identific\u00f3 que en cada di\u00e1logo particip\u00f3 un total aproximado de 100 personas.<\/p>\n<p>En tanto instancia de participaci\u00f3n temprana, el desarrollo de estos di\u00e1logos ciudadanos se contempla en una resoluci\u00f3n exenta del MMA<a href=\"#_ftn2\" name=\"_ftnref2\"><sup>[2]<\/sup><\/a> denominada \u201cNorma General de Participaci\u00f3n Ciudadana del Ministerio del Medio Ambiente que establece Modalidades Formales y Espec\u00edficas en el Marco de la Ley N\u00ba 20.500\u201d. En dicho documento se detallan los mecanismos de participaci\u00f3n ciudadana<a href=\"#_ftn3\" name=\"_ftnref3\"><sup>[3]<\/sup><\/a> que, dada su forma y contenido, se corresponden con la figura de \u201ccabildos ciudadanos\u201d, a saber, \u201cprocesos de discusi\u00f3n y reflexi\u00f3n que facilitan la posibilidad de escuchar las opiniones y propuestas ciudadanas respecto a una determinada materia de inter\u00e9s p\u00fablico\u201d. Los di\u00e1logos constituyen en este sentido una \u201cmetodolog\u00eda de trabajo que permite recabar antecedentes para elaborar una determinada pol\u00edtica p\u00fablica o instrumento estrat\u00e9gico, en etapas tempranas de dise\u00f1o\u201d, pudiendo ser de car\u00e1cter territorial o sectorial, nacional o local<a href=\"#_ftn4\" name=\"_ftnref4\"><sup>[4]<\/sup><\/a>. En principio, estas instancias permitir\u00edan mejorar el est\u00e1ndar m\u00ednimo para la participaci\u00f3n ciudadana en materia ambiental, aplicable tambi\u00e9n al caso del cambio clim\u00e1tico. Esto considerar\u00eda, por ejemplo, las recomendaciones de la Organizaci\u00f3n para la Cooperaci\u00f3n y el Desarrollo Econ\u00f3micos (OCDE) en cuanto a los procesos de participaci\u00f3n ciudadana. En efecto, el informe <em>Evaluaciones del desempe\u00f1o ambiental: Chile 2016<\/em> de la OCDE, se\u00f1ala que el pa\u00eds \u201clogra un puntaje menor en materia de participaci\u00f3n de la ciudadan\u00eda, que a menudo interviene demasiado tarde en el proceso de toma de decisiones\u201d (OCDE\/CEPAL, 2016: 129).<\/p>\n<p><a href=\"http:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla.jpg\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\"aligncenter wp-image-22195\" src=\"http:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-300x60.jpg\" alt=\"\" width=\"620\" height=\"124\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-300x60.jpg 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-768x155.jpg 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-1024x206.jpg 1024w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-696x140.jpg 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-1068x215.jpg 1068w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Tabla-1920x387.jpg 1920w\" sizes=\"(max-width: 620px) 100vw, 620px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><strong>Fuente:<\/strong> Elaboraci\u00f3n propia en base datos proporcionados por el MMA (MMA\/EUROCLIMA, 2019).<\/p>\n<p>Por otra parte, el nivel de participaci\u00f3n considerado en la definici\u00f3n de estrategias para enfrentar los desaf\u00edos relacionados con el cambio clim\u00e1tico es muy relevante debido al tipo de problema que se trata. En efecto, el cambio clim\u00e1tico es un <em>wicked problem<\/em><a href=\"#_ftn5\" name=\"_ftnref5\"><sup>[5]<\/sup><\/a> que requiere la articulaci\u00f3n de m\u00faltiples perspectivas para ser abordado. En esta l\u00ednea, es reconocido el llamado a fortalecer estrategias de gobernanza que favorezcan el involucramiento de los ciudadanos en los diferentes niveles de toma de decisiones (desde lo local a lo global)<a href=\"#_ftn6\" name=\"_ftnref6\"><sup>[6]<\/sup><\/a>.<\/p>\n<p>El proceso participativo llevado a cabo por el MMA permite as\u00ed analizar la manera en que el Estado se est\u00e1 haciendo cargo de este problema, donde cabe preguntarse: (1) \u00bfCu\u00e1l es el grado de autonom\u00eda e incidencia que tienen las agencias no estatales en la implementaci\u00f3n de decisiones? (2) \u00bfQu\u00e9 rol y peso se otorga a las diferentes formas de producci\u00f3n de conocimiento en la formulaci\u00f3n del anteproyecto? (3) \u00bfQu\u00e9 grado de injerencia se concede a los ciudadanos respecto de la toma de decisiones en torno a su formulaci\u00f3n?<\/p>\n<p>Para responder a lo anterior, observaremos este proceso a trav\u00e9s de un modelo de an\u00e1lisis que combina <em>formas<\/em><a href=\"#_ftn7\" name=\"_ftnref7\"><strong><sup>[7]<\/sup><\/strong><\/a> y <em>niveles<\/em><a href=\"#_ftn8\" name=\"_ftnref8\"><strong><sup>[8]<\/sup><\/strong><\/a> de participaci\u00f3n, ambas dimensiones ampliamente estudiadas en la literatura.<\/p>\n<p>El an\u00e1lisis de las formas se centra en la calidad de la participaci\u00f3n y, en particular, en los prop\u00f3sitos, resultados esperados, justificaci\u00f3n y supuestos en los que \u00e9sta se funda. Desde este enfoque es posible identificar tres tipos de participaci\u00f3n: (1) Forma operativa (instrumental), donde la participaci\u00f3n se presenta como una estrategia para coordinar decisiones y acciones relacionadas con un problema espec\u00edfico, relevando la importancia del grado de autonom\u00eda e incidencia que tienen las agencias no estatales en la toma de decisiones; (2) Forma sustantiva (epist\u00e9mica), que refiere a la relaci\u00f3n entre ciencia, otras fuentes de conocimiento y su impacto sobre la toma de decisiones; (3) Forma normativa (pol\u00edtica), que refiere a equilibrios de poder y concepciones de democracia, problematizando el grado de injerencia que se le concede a los ciudadanos en la toma de decisiones colectivamente vinculantes.<\/p>\n<p>Paralelamente, el an\u00e1lisis de los niveles se centra en el involucramiento del p\u00fablico (inclusividad y empoderamiento) y en la direccionalidad del flujo de informaci\u00f3n entre el p\u00fablico y los tomadores de decisiones. Bajo esta perspectiva es posible identificar niveles en un continuum entre informaci\u00f3n (unidireccional, desde tomadores de decisiones hacia el p\u00fablico), pasando por consulta (bidireccional, pero donde las contribuciones del p\u00fablico no se consideran vinculantes), negociaci\u00f3n (bidireccional en una relaci\u00f3n competitiva entre las partes), co-construcci\u00f3n (bidireccional en una relaci\u00f3n cooperativa que busca consenso), hasta llegar a empoderamiento (bidireccional, pero con peso preponderante del p\u00fablico, donde se busca potenciar su autonom\u00eda).<\/p>\n<p>A lo anterior subyace adem\u00e1s la dimensi\u00f3n <em>unidad de participaci\u00f3n<\/em>, que nos permite analizar el car\u00e1cter individual o grupal de la participaci\u00f3n, ambos relacionados respectivamente con modelos que enfatizan la autonom\u00eda individual y la elecci\u00f3n racional o con modelos \u201cpluralistas\u201d que identifican grupos con intereses comunes que deben ser representados en la negociaci\u00f3n<a href=\"#_ftn9\" name=\"_ftnref9\"><sup>[9]<\/sup><\/a>.<\/p>\n<p>Nuestro modelo de an\u00e1lisis (Figura 1) propone, por tanto, combinar las dimensiones antes se\u00f1aladas (formas y niveles), a trav\u00e9s de un modelo que distingue las 3 formas de participaci\u00f3n (operativa, sustantiva y normativa) y los 5 niveles de participaci\u00f3n (en orden ascendente: informaci\u00f3n, consulta, negociaci\u00f3n, co-construcci\u00f3n y empoderamiento), asumiendo que las l\u00f3gicas de participaci\u00f3n, individual y grupal, subyacen a las mismas de forma transversal.<\/p>\n<p><a href=\"http:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3.jpg\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\"aligncenter wp-image-22194\" src=\"http:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-300x150.jpg\" alt=\"\" width=\"556\" height=\"278\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-300x150.jpg 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-768x383.jpg 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-1024x511.jpg 1024w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-696x347.jpg 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-1068x533.jpg 1068w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3-842x420.jpg 842w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/08\/Figura-1-3.jpg 1114w\" sizes=\"(max-width: 556px) 100vw, 556px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><strong>Fuente:<\/strong> Elaboraci\u00f3n propia.<\/p>\n<p><strong>Di\u00e1logos ciudadanos regionales <\/strong><\/p>\n<p>Observar el proceso participativo de los di\u00e1logos regionales a la luz de la propuesta te\u00f3rica antes expuesta<a href=\"#_ftn10\" name=\"_ftnref10\"><sup>[10]<\/sup><\/a>, nos permite concluir lo siguiente:<\/p>\n<p>En primer lugar, y analizando la participaci\u00f3n a partir de la forma operativa, es posible constatar que el proceso participativo no favoreci\u00f3 la autonom\u00eda e incidencia de los\/las ciudadanas, sino que se trat\u00f3 m\u00e1s bien de un proceso estandarizado tanto a nivel de contenidos<a href=\"#_ftn11\" name=\"_ftnref11\"><sup>[11]<\/sup><\/a> como de metodolog\u00eda<a href=\"#_ftn12\" name=\"_ftnref12\"><sup>[12]<\/sup><\/a><em>. <\/em>A nivel de contenidos, si bien existi\u00f3 un esfuerzo de parte del MMA en adaptarlos a las particularidades regionales, se observ\u00f3 que aspectos relevantes de las condiciones geogr\u00e1ficas y sociales en materia de cambio clim\u00e1tico no fueron abordados. Los formularios eran pr\u00e1cticamente id\u00e9nticos por regi\u00f3n, a excepci\u00f3n de peque\u00f1as modificaciones (por ejemplo, en la regi\u00f3n de Atacama se elimin\u00f3 del formulario como impacto asociado al cambio clim\u00e1tico las \u201cmarejadas\u201d y en su lugar se introdujo \u201cinundaciones\u201d<a href=\"#_ftn13\" name=\"_ftnref13\"><sup>[13]<\/sup><\/a>). Estandarizar contenidos sin tener en cuenta variables contextuales puede sesgar la experiencia participativa, as\u00ed como obviar aportes que no entran en las variables contempladas. Desde un punto de vista metodol\u00f3gico, la existencia de preguntas predeterminadas as\u00ed como la entrega de contenidos previos (antes de iniciar el trabajo en grupos), tambi\u00e9n se presentan como un obst\u00e1culo en t\u00e9rminos de autonom\u00eda e incidencia, en la medida en que pudieron condicionar el resultado de las respuestas de los\/las participantes, en especial porque es el \u00fanico material que a priori poseen \u00e9stos\/as para participar de la discusi\u00f3n. En este sentido, m\u00e1s que lidiar con la posible asimetr\u00eda de informaci\u00f3n inicial entre los\/las asistentes, el proceso participativo tendi\u00f3 a estandarizar los contenidos de la discusi\u00f3n.<\/p>\n<p>En segundo lugar, y al analizar la participaci\u00f3n desde la forma sustantiva, es posible concluir que la importancia que el proceso participativo otorga a otros tipos de conocimiento (incluyendo, por ejemplo, el conocimiento ind\u00edgena) es limitada. En otras palabras, el proceso parecer\u00eda otorgar una importancia mayor al conocimiento de corte cient\u00edfico o t\u00e9cnico sobre el no cient\u00edfico. Esto se hace evidente, por una parte, en el perfil de los\/las participantes, m\u00e1s espec\u00edficamente en la sobrerrepresentaci\u00f3n alcanzada por el sector p\u00fablico y la infrarrepresentaci\u00f3n de otros sectores (gremios, organizaciones de la sociedad civil, organizaciones ind\u00edgenas, entre otros) y, por otra parte, en la discusi\u00f3n de tem\u00e1ticas de car\u00e1cter jur\u00eddico, cient\u00edfico o t\u00e9cnico, que competen sobre todo a ciertos \u00f3rganos del Estado y a la administraci\u00f3n p\u00fablica. Adem\u00e1s de plantear un desequilibrio entre los contenidos y el trabajo que se espera de los\/las participantes, esto vendr\u00eda a minar sus expectativas al no sentirse \u201cparte\u201d del proceso.<\/p>\n<p>Una tercera conclusi\u00f3n que se desprende del an\u00e1lisis, esta vez observando la participaci\u00f3n desde su forma normativa, es que a\u00fan es incierto el grado de poder o injerencia que se le entrega al p\u00fablico en este proceso participativo. Esto se relaciona estrechamente con el <em>objetivo<\/em> de estas instancias: generar insumos para la construcci\u00f3n del anteproyecto de ley. Sin embargo, no queda claro hasta ahora c\u00f3mo las observaciones del p\u00fablico influyeron en los contenidos del anteproyecto de ley (introducido para consulta p\u00fablica el 19 de junio de 2019). Asimismo, no fue posible acceder a la metodolog\u00eda utilizada para procesar la informaci\u00f3n obtenida de los talleres, ni qu\u00e9 parte de esta fue considerada en la redacci\u00f3n del anteproyecto<a href=\"#_ftn14\" name=\"_ftnref14\"><sup>[14]<\/sup><\/a>. Esto dificulta la transparencia del proceso y la rendici\u00f3n de cuentas, generando cuestionamientos sobre el real impacto de la participaci\u00f3n en la construcci\u00f3n del anteproyecto de ley.<\/p>\n<p>En definitiva, considerando los niveles de participaci\u00f3n, es posible indicar que el poder de injerencia es m\u00ednimo en un tipo de instancias que revisten, adem\u00e1s, un car\u00e1cter no vinculante: esto nos permitir\u00eda situar el proceso en el nivel de consulta, sin llegar en ning\u00fan caso a la negociaci\u00f3n entre iguales y sin la garant\u00eda de que las ideas ciudadanas vayan a ser consideradas.<\/p>\n<p><strong>Di\u00e1logos sectoriales <\/strong><\/p>\n<p>Por su parte, el an\u00e1lisis de los dos di\u00e1logos sectoriales arroj\u00f3 las siguientes conclusiones:<\/p>\n<p>En primer lugar, observando la participaci\u00f3n en su forma operativa, es posible afirmar que el proceso fue favorable en t\u00e9rminos de autonom\u00eda e incidencia (sobre todo el primer taller), en la medida en que tanto la metodolog\u00eda<a href=\"#_ftn15\" name=\"_ftnref15\"><sup>[15]<\/sup><\/a> como los contenidos<a href=\"#_ftn16\" name=\"_ftnref16\"><sup>[16]<\/sup><\/a> discutidos permitieron hacer parte de la discusi\u00f3n a las diferentes partes expertas involucradas. La incidencia en la discusi\u00f3n del anteproyecto se ve obstaculizada, no obstante, por los tiempos. Primero, porque intentar generar insumos cient\u00edfico-t\u00e9cnicos en tiempos acotados de discusi\u00f3n, no asegura alcanzar la profundidad requerida; y segundo, porque reducir el proceso participativo de estos actores a s\u00f3lo dos instancias de taller no asegura una inclusi\u00f3n efectiva o significativa en la discusi\u00f3n.<\/p>\n<p>Por otra parte, a pesar de que los di\u00e1logos sectoriales convocan a expertos provenientes de distintos \u00e1mbitos (sociedad civil, academia, sector p\u00fablico y privado), el proceso otorg\u00f3 una mayor importancia al conocimiento cient\u00edfico-t\u00e9cnico. La generaci\u00f3n de conocimiento, por tanto, se vio mermada (especialmente en el segundo taller) por las dificultades tanto para articular racionalidades diferentes como para la comprensi\u00f3n de las preguntas (que a menudo requer\u00edan de un alto nivel de especializaci\u00f3n y conocimiento en el tema), lo que impidi\u00f3 una participaci\u00f3n equitativa. Sin duda, la presencia de expertos provenientes de distintos \u00e1mbitos es fundamental para lograr procesos participativos sustantivos que permitan mejorar el contenido de los proyectos al recoger las diferentes perspectivas involucradas, pero esto debe hacerse alineando el perfil de los\/las participantes con las expectativas del trabajo que se espera de ellos\/as.<\/p>\n<p>Por \u00faltimo, tal como ocurre en los di\u00e1logos regionales, al analizar la participaci\u00f3n desde la forma normativa, no es posible concluir cu\u00e1l es el grado de injerencia que se le concede al p\u00fablico, pues no existe tampoco informaci\u00f3n disponible respecto de la metodolog\u00eda utilizada para procesar la informaci\u00f3n, ni tampoco sobre qu\u00e9 parte de \u00e9sta fue considerada en la redacci\u00f3n del anteproyecto.<\/p>\n<p>Todo lo anterior nos lleva a situar nuevamente el proceso en el nivel de consulta. Sin perjuicio de que existan otras instancias en las que esos mismos actores tengan una cierta capacidad de negociaci\u00f3n, los di\u00e1logos sectoriales no parecieran ser el medio adecuado para \u201cinstitucionalizar\u201d la relaci\u00f3n que el Estado tiene con otros actores, en particular por su car\u00e1cter esencialmente ef\u00edmero.<\/p>\n<p><strong>Reflexiones finales<\/strong><\/p>\n<p>A partir del an\u00e1lisis realizado, y considerando las principales recomendaciones de la literatura en la materia, se identifican aspectos clave a tener presentes en el contexto actual de discusi\u00f3n del anteproyecto de ley:<\/p>\n<ol>\n<li>Necesidad de transparentar los objetivos de la participaci\u00f3n, la metodolog\u00eda a utilizar y el tratamiento de los resultados, de manera que los\/las participantes tengan una retroalimentaci\u00f3n de sus aportes, lo que deber\u00eda ser, adem\u00e1s, informaci\u00f3n p\u00fablica y de f\u00e1cil acceso.<\/li>\n<li>Las preguntas, el contenido y la conducci\u00f3n de este tipo de procesos, deben orientarse hacia instancias de discusi\u00f3n, aprendizaje y colaboraci\u00f3n entre los\/las participantes.<\/li>\n<li>Ajustar el contenido a los lugares donde se comunican y se trabajan otorga pertinencia a la convocatoria, logrando un proceso m\u00e1s cercano a las experiencias en el \u00e1mbito local.<\/li>\n<li>M\u00e1s informaci\u00f3n bajo la forma de insumos no implica una mejor toma de decisiones si no se considera cu\u00e1nta, qui\u00e9n la procesa y c\u00f3mo se procesa, lo que puede significar la exclusi\u00f3n de otros tipos de conocimientos.<\/li>\n<li>El tipo de participaci\u00f3n determina el modelo de gobernanza del cambio clim\u00e1tico, y la complejidad del problema exige ir hacia formas de gobernanza m\u00e1s amplias y m\u00e1s complejas.<\/li>\n<\/ol>\n<h5><strong>Referencias <\/strong><\/h5>\n<p>Amstein, S. R. (2004). A ladder of citizen participation. <em>Journal of the American Institute of Planners<\/em>, <em>35<\/em>(4), 216\u2013224.<\/p>\n<p>Aranda Ortega, J. (2018). Breve reflexi\u00f3n sobre cuatro conceptos jur\u00eddicos de participaci\u00f3n ciudadana a prop\u00f3sito del Derecho Ambiental chileno.\u00a0<em>Revista de Derecho Ambiental,\u00a0<\/em>(09), pp. 31-52, <a href=\"https:\/\/doi:10.5354\/0719-4633.2018.49431\">https:\/\/doi:10.5354\/0719-4633.2018.49431<\/a><\/p>\n<p>CEPAL (2013). Acceso a la informaci\u00f3n, participaci\u00f3n y justicia en temas ambientales en Am\u00e9rica Latina y el Caribe: situaci\u00f3n actual, perspectivas y ejemplos de buenas pr\u00e1cticas. <em>Serie Medio Ambiente y Desarrollo N\u00b0 151, Comisi\u00f3n Econ\u00f3mica para Am\u00e9rica Latina y el Caribe (CEPAL),<\/em>\u00a0 Santiago de Chile. Disponible en: <a href=\"http:\/\/repositorio.cepal.org\/bitstream\/handle\/11362\/21751\/6\/LCL3549REV2_es.pdf\">http:\/\/repositorio.cepal.org\/bitstream\/handle\/11362\/21751\/6\/LCL3549REV2_es.pdf<\/a>.<\/p>\n<p>CEPAL-OCDE (2016). Evaluaciones del desempen\u0303o ambiental: Chile 2016, <em>Reporte de la Comisio\u0301n Econo\u0301mica para Ame\u0301rica Latina y el Caribe y la Organizacio\u0301n para la Cooperacio\u0301n y el Desarrollo Econo\u0301micos<\/em>. Santiago, 2016. Disponible en <a href=\"https:\/\/repositorio.cepal.org\/bitstream\/handle\/11362\/40308\/S1600413_es.pdf\">https:\/\/repositorio.cepal.org\/bitstream\/handle\/11362\/40308\/S1600413_es.pdf<\/a><\/p>\n<p>Edelenbos, J., van Buuren, A., & van Schie, N. (2011). Co-producing knowledge: Joint knowledge production between experts, bureaucrats and stakeholders in Dutch water management projects. <em>Environmental Science and Policy<\/em>, <em>14<\/em>(6), 675\u2013684. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.envsci.2011.04.004\">https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.envsci.2011.04.004<\/a><\/p>\n<p>Glucker, A. N., Driessen, P. P. J., Kolhoff, A., & Runhaar, H. A. C. (2013). Public participation in environmental impact assessment: Why, who and how? <em>Environmental Impact Assessment Review<\/em>, <em>43<\/em>, 104\u2013111. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.eiar.2013.06.003\">https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.eiar.2013.06.003<\/a><\/p>\n<p>Jordan, Andrew, Dave Huitema, Harro Van Asselt, and Johanna Forster, eds. (2018). <em>Governing climate change: Polycentricity in action?<\/em>. Cambridge University Press <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1017\/9781108284646\">https:\/\/doi.org\/10.1017\/9781108284646<\/a><\/p>\n<p>Mielke, J., Verma\u00dfen, H., Ellenbeck, S., Fernandez Milan, B., & Jaeger, C. (2016). Stakeholder involvement in sustainability science – A critical view. <em>Energy Research and Social Science<\/em>, <em>17<\/em>, 71\u201381. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.erss.2016.04.001\">https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.erss.2016.04.001<\/a><\/p>\n<p>MMA\/EUROCLIMA (2019). Di\u00e1logos sectoriales. Construcci\u00f3n del anteproyecto de Ley de Cambio Clim\u00e1tico. <em>Presentaci\u00f3n en el marco del primer di\u00e1logo sectorial sobre el anteproyecto de ley de cambio clim\u00e1tico<\/em>, Santiago, 18 de enero de 2019.<\/p>\n<p>Pieczka, M., & Escobar, O. (2013). Dialogue and science: Innovation in policy-making and the discourse of public engagement in the UK. <em>Science and Public Policy<\/em>, <em>40<\/em>(1), 113\u2013126. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1093\/scipol\/scs073\">https:\/\/doi.org\/10.1093\/scipol\/scs073<\/a><\/p>\n<p>Rowe, G., & Frewer, L. J. (2005). A typology of public engagement mechanisms. <em>Science Technology and Human Values<\/em>, <em>30<\/em>(2), 251\u2013290. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1177\/0162243904271724\">https:\/\/doi.org\/10.1177\/0162243904271724<\/a><\/p>\n<p>Stirling, A. (2006). Analysis, participation and power: Justification and closure in participatory multi-criteria analysis. <em>Land Use Policy<\/em>, <em>23<\/em>(1), 95\u2013107. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.landusepol.2004.08.010\">https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.landusepol.2004.08.010<\/a><\/p>\n<p>Sun, J. and Yang, K. (2016). The Wicked Problem Of Climate Change: A New Approach Based On Social Mess And Fragmentation. <em>Sustainability 8<\/em>(12)<em>,<\/em> 1312. <a href=\"https:\/\/doi:10.3390\/su8121312\">https:\/\/doi:10.3390\/su8121312<\/a><\/p>\n<p>Urquiza, A., & Morales, B. (2015). La observaci\u00f3n del problema ambiental en un contexto de diferenciaci\u00f3n funcional.\u00a0<em>Revista Mad,\u00a0<\/em>(33), 64-93. <a href=\"https:\/\/doi:10.5354\/0718-0527.2015.37324\">https:\/\/doi:10.5354\/0718-0527.2015.37324<\/a><\/p>\n<p>Welp, M., de la Vega-Leinert, A., Stoll-Kleemann, S., & Jaeger, C. C. (2006). Science-based stakeholder dialogues: Theories and tools. <em>Global Environmental Change<\/em>, <em>16<\/em>(2), 170\u2013181. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.gloenvcha.2005.12.002\">https:\/\/doi.org\/10.1016\/j.gloenvcha.2005.12.002<\/a><\/p>\n<p>Wesselink, A., Paavola, J., Fritsch, O., & Renn, O. (2011). Rationales for public participation in environmental policy and governance: Practitioners\u2019 perspectives. <em>Environment and Planning A<\/em>, <em>43<\/em>(11), 2688\u20132704. <a href=\"https:\/\/doi.org\/10.1068\/a44161\">https:\/\/doi.org\/10.1068\/a44161<\/a><\/p>\n<p>Wright, Z. M. (2012). A Voice for the Community: Public Participation in Wind Energy Development. <em>Dalhousie Journal of Interdisciplinary Management<\/em>, <em>8<\/em>(1). https:\/\/doi.org\/10.5931\/djim.v8i1.283<\/p>\n<h5><strong>Notas<\/strong><\/h5>\n<p><a href=\"#_ftnref1\" name=\"_ftn1\"><sup>[1]<\/sup><\/a> Para conocer parcialmente los resultados por regiones de dichos di\u00e1logos visite: <a href=\"https:\/\/mma.gob.cl\/finalizaron-los-dialogos-ciudadanos\/\">https:\/\/mma.gob.cl\/finalizaron-los-dialogos-ciudadanos\/<\/a>.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref2\" name=\"_ftn2\"><sup>[2]<\/sup><\/a> Resoluci\u00f3n exenta N\u00ba 601\/2015 del MMA de 8 de julio de 2015.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref3\" name=\"_ftn3\"><sup>[3]<\/sup><\/a> En el art\u00edculo 8 de la resoluci\u00f3n exenta mencionada se enumeran los siguientes: acceso a la informaci\u00f3n ambiental relevante, Consulta Ciudadana, Consejos de la Sociedad Civil, Cuenta P\u00fablica Participativa, Audiencias P\u00fablicas, Di\u00e1logos Participativos, Cabildos Ciudadanos y Comit\u00e9s, Grupos o Mesas p\u00fablico-privado de car\u00e1cter ambiental.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref4\" name=\"_ftn4\"><sup>[4]<\/sup><\/a> Art\u00edculos 42 y 43 de la Resoluci\u00f3n exenta N\u00ba 601\/2015 del MMA de 8 de julio de 2015.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref5\" name=\"_ftn5\"><sup>[5]<\/sup><\/a>\u00a0 Sun, J. and Yang, K. (2016). The Wicked Problem Of Climate Change: A New Approach Based On Social Mess And Fragmentation, <em>Sustainability 8 <\/em>(12)<em>,<\/em>1312, doi:10.3390\/su8121312.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref6\" name=\"_ftn6\"><sup>[6]<\/sup><\/a> Jordan, Andrew, Dave Huitema, Harro Van Asselt, and Johanna Forster, eds. (2018) Governing climate change: Polycentricity in action?. <em>Cambridge University Press<\/em>.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref7\" name=\"_ftn7\"><sup>[7]<\/sup><\/a> Glucker et al., 2013; Mielke et al., 2016; Stirling, 2006; Welp et al., 2006; Wesselink et al., 2011.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref8\" name=\"_ftn8\"><sup>[8]<\/sup><\/a> Arnstein, 1969; Edelenbos, van Buuren and van Schie, 2011; Pieczka and Escobar, 2013; Gene Rowe and Frewer, 2005; Wright, 2012.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref9\" name=\"_ftn9\"><sup>[9]<\/sup><\/a> Glicken 1999, 2000; Wright 2012.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref10\" name=\"_ftn10\"><sup>[10]<\/sup><\/a> Para llevar a cabo el seguimiento del proceso participativo, miembros del Centro de Derecho Ambiental (CDA) y del (CR)<sup>2<\/sup> asistieron a al menos el 80% de los di\u00e1logos ciudadanos regionales, y a los dos di\u00e1logos sectoriales, llevando a cabo un reporte de la din\u00e1mica y los contenidos abordados en cada sesi\u00f3n (observaci\u00f3n participante). Junto a los documentos oficiales de los di\u00e1logos, y a la realizaci\u00f3n de entrevistas complementarias, estos reportes fueron analizados a trav\u00e9s de un <em>software <\/em>de an\u00e1lisis cualitativo de datos, considerando el marco te\u00f3rico construido con referentes cient\u00edficos en materia de procesos participativos.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref11\" name=\"_ftn11\"><sup>[11]<\/sup><\/a> Los di\u00e1logos estuvieron enfocados en la revisi\u00f3n de impactos a nivel nacional y regional, la discusi\u00f3n de medidas de mitigaci\u00f3n y adaptaci\u00f3n, preguntas abiertas sobre gobernanza y la revisi\u00f3n de instrumentos de pol\u00edtica p\u00fablica en los que se considera la variable del cambio clim\u00e1tico.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref12\" name=\"_ftn12\"><sup>[12]<\/sup><\/a> Los di\u00e1logos se estructuraron de la siguiente manera: en primer lugar, dos exposiciones introductorias sobre el cambio clim\u00e1tico \u2013con la excepci\u00f3n del realizado en la Regi\u00f3n Metropolitana, cuya din\u00e1mica fue similar, pero con variables en la distribuci\u00f3n de las exposiciones\u2013, en las que se presentaba el fen\u00f3meno clim\u00e1tico y los impactos identificados por regi\u00f3n. A continuaci\u00f3n, se solicitaba completar un formulario individual seguido de una discusi\u00f3n en grupos de entre, aproximadamente, 6 a 10 integrantes, moderados por una persona de la organizaci\u00f3n, donde se discut\u00eda la priorizaci\u00f3n y definici\u00f3n de impactos, medidas e instrumentos asociados al cambio clim\u00e1tico m\u00e1s relevantes, en el caso de las preguntas predeterminadas, y se compart\u00edan visiones individuales en el caso de las preguntas abiertas.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref13\" name=\"_ftn13\"><sup>[13]<\/sup><\/a> V\u00e9ase el informe del 8\u00ba di\u00e1logo ciudadano (Copiap\u00f3, 17 de diciembre de 2018) elaborado por el Observatorio Ley Cambio Clim\u00e1tico para Chile, disponible en: <a href=\"http:\/\/leycambioclimatico.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/01\/Atacama-Bolet%C3%ADn-8vo-Di%C3%A1logo-Ciudadano.pdf\">http:\/\/leycambioclimatico.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2019\/01\/Atacama-Bolet%C3%ADn-8vo-Di\u00e1logo-Ciudadano.pdf<\/a><\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref14\" name=\"_ftn14\"><sup>[14]<\/sup><\/a> La \u00fanica informaci\u00f3n disponible, adem\u00e1s de un n\u00famero incompleto de informes en la p\u00e1gina web del MMA, es la presentaci\u00f3n de resultados de los di\u00e1logos regionales presentados en el primer di\u00e1logo sectorial, pero no se explicita si se trata de una rendici\u00f3n de cuentas, de un insumo para la discusi\u00f3n (objetivo declarado en los di\u00e1logos ciudadanos) o si, a partir de estos resultados, se determinaron los temas\/instrumentos\/preguntas que se abordaron en los posteriores di\u00e1logos sectoriales, y cuya informaci\u00f3n habr\u00eda alimentado la elaboraci\u00f3n final del anteproyecto.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref15\" name=\"_ftn15\"><sup>[15]<\/sup><\/a> La metodolog\u00eda fue similar a la de los di\u00e1logos regionales, salvo la conformaci\u00f3n de los grupos de trabajo: en el primer di\u00e1logo, los\/as participantes fueron distribuidos en grupos por afinidad profesional (sociedad civil, academia, sector p\u00fablico y privado), y en el segundo, fueron distribuidos en grupos heterog\u00e9neos.<\/p>\n<p><a href=\"#_ftnref16\" name=\"_ftn16\"><sup>[16]<\/sup><\/a> Los temas que se sometieron a discusi\u00f3n fueron los mecanismos de participaci\u00f3n en la gobernanza clim\u00e1tica en el futuro anteproyecto (en el primer di\u00e1logo, rol del \u201cComit\u00e9 Cient\u00edfico\u201d y de la \u201cComisi\u00f3n Asesora Nacional\u201d) y la propuesta de instrumentos de gesti\u00f3n y financiamiento que estar\u00edan presentes en el anteproyecto (en el segundo di\u00e1logo). El formulario present\u00f3 preguntas abiertas en mayor medida, y algunas cerradas con predeterminaci\u00f3n de contenidos.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Guadalupe Jim\u00e9nez,\u00a0Asistente de investigaci\u00f3n de la l\u00ednea GOVSPI (CR)2 B\u00e1rbara Morales,\u00a0Encargada de Di\u00e1logo e Interdisciplina(CR)2 Ignacio Neira, Estudiante de Mag\u00edster en An\u00e1lisis Sist\u00e9mico Aplicado a la Sociedad (U. de Chile) Anah\u00ed Urquiza,\u00a0Acad\u00e9mica FACSO, U. de Chile e Investigadora (CR)2 Desde fines de noviembre de 2018 hasta enero de 2019, el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) […]<\/p>\n","protected":false},"author":36,"featured_media":22190,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[28,340,1136],"tags":[32,81,198],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/22188"}],"collection":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/users\/36"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=22188"}],"version-history":[{"count":7,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/22188\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":22367,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/22188\/revisions\/22367"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/media\/22190"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=22188"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=22188"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=22188"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}