{"id":39137,"date":"2023-03-08T12:51:10","date_gmt":"2023-03-08T15:51:10","guid":{"rendered":"http:\/\/www.cr2.cl\/?p=39137"},"modified":"2023-05-31T12:06:23","modified_gmt":"2023-05-31T16:06:23","slug":"analisis-cr2-megaincendios-forestales-en-un-clima-cambiante","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.cr2.cl\/analisis-cr2-megaincendios-forestales-en-un-clima-cambiante\/","title":{"rendered":"An\u00e1lisis (CR)2 | Megaincendios forestales en un clima cambiante"},"content":{"rendered":"<p><em>Por Ren\u00e9 Garreaud, director (CR)2 y acad\u00e9mico DGF-U.Chile; Mart\u00edn Jacques, investigador (CR)2 y acad\u00e9mico DGEO-UdeC; y An\u00edbal Pauchard, investigador IEB y acad\u00e9mico Forestal-UdeC\u00a0<\/em><\/p>\n<ul>\n<li>Los veranos de los a\u00f1os 2017 y 2023 han revelado un nuevo y desolador r\u00e9gimen de incendios forestales en la zona centro-sur de Chile, en que unos pocos eventos experimentan una r\u00e1pida e intensa propagaci\u00f3n quemando cientos de miles de hect\u00e1reas (ha) en los primeros d\u00edas desde su ignici\u00f3n. El \u00e1rea quemada total en cada una de las temporadas super\u00f3 las 450 mil ha -cerca de 10 veces el promedio hist\u00f3rico- causando la lamentable muerte de decenas de personas, la destrucci\u00f3n de residencias e infraestructura, el deterioro de la biodiversidad y grandes p\u00e9rdidas en diversos sectores productivos. En este An\u00e1lisis mostramos que estos megaincendios han sido coincidentes con d\u00edas extremadamente c\u00e1lidos (temperaturas del aire sobre los 40 \u00b0C) y vientos muy intensos en la zona de ocurrencia que, unidos a un abundante y continuo combustible de vegetaci\u00f3n y m\u00faltiples focos de ignici\u00f3n, son una receta perfecta para generar graves cat\u00e1strofes socioambientales. Estas condiciones meteorol\u00f3gicas tampoco tienen precedente en el registro hist\u00f3rico y su recurrencia en los \u00faltimos a\u00f1os sugiere una contribuci\u00f3n del cambio clim\u00e1tico al establecimiento de este nuevo r\u00e9gimen de incendios forestales.<\/li>\n<\/ul>\n<h6><strong>As\u00ed era antes\u2026<\/strong><\/h6>\n<p>La historia reciente (1985-2015) de los incendios forestales en Chile, sintetizada en la Figura 1, est\u00e1 caracterizada por la ocurrencia de varios miles de eventos (5000 en promedio) por temporada (concentrados entre noviembre y marzo) y con ocurrencia mayoritaria entre las regiones de Valpara\u00edso y Los R\u00edos. El \u00e1rea quemada cubre un amplio rango, abarcando desde incendios menores a una hect\u00e1rea (ha), pasando por eventos de magnitud (sobre las 200 ha) y llegando hasta miles y decenas de miles de hect\u00e1reas (<a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2020\/01\/Informe-CR2-IncendiosforestalesenChile.pdf\">Gonz\u00e1lez et al., 2020<\/a>). Por temporada, el \u00e1rea quemada fluct\u00faa entre 10.000 y 100.000 ha, con un promedio en torno a las 50.000.<\/p>\n<p>La distribuci\u00f3n espacial de los incendios est\u00e1 determinada por el foco inicial de ignici\u00f3n y la direcci\u00f3n y extensi\u00f3n de la propagaci\u00f3n. Ambos elementos est\u00e1n condicionados, en buena parte, por el uso del suelo, que determina la cantidad y tipo de combustible, que puede ser bosques, plantaciones forestales, entre otros. Es importante considerar que el origen de los incendios forestales se puede dar fuera del bosque, como en la orilla de los caminos, predios rurales o, incluso, en zonas urbanas adyacentes a territorios forestales, pero que r\u00e1pidamente pueden tomar un car\u00e1cter forestal al propagarse hacia los bosques y plantaciones forestales donde existe gran cantidad de combustible. Por otra parte, las variaciones del \u00e1rea quemada entre una temporada y otra son moduladas por las condiciones clim\u00e1ticas que se dan antes y durante la temporada de incendios, en especial la temperatura, la humedad y la precipitaci\u00f3n (<a href=\"http:\/\/dgf.uchile.cl\/rene\/PUBS\/Climate_Fire_CentralChile-Ecosphere.pdf\">Urrutia-Jalabert et al., 2018<\/a>).<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1.png\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\" td-modal-image aligncenter wp-image-39138\" src=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-1024x781.png\" alt=\"\" width=\"500\" height=\"381\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-1024x781.png 1024w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-300x229.png 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-768x586.png 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-80x60.png 80w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-696x531.png 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-1068x814.png 1068w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1-551x420.png 551w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-1.png 1377w\" sizes=\"(max-width: 500px) 100vw, 500px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><em><strong>Figura 1.<\/strong> El r\u00e9gimen de incendios forestales en Chile: (a) el n\u00famero total de eventos (l\u00ednea amarilla), y (b) \u00e1rea total quemada por temporada (barras celestes). La temporada se extiende desde julio a junio y el a\u00f1o indica el mes de enero de cada temporada. Por ejemplo, la temporada indicada como 2017 se extiende desde julio del 2016 a junio del 2017. Fuente: CONAF. Para las temporadas 2017 y 2023, la parte verde de la barra indica el \u00e1rea quemada en los megaincendios. La l\u00ednea roja (panel c) corresponde al valor m\u00e1ximo de la temperatura registrada durante la temporada de incendios en las estaciones meteorol\u00f3gicas de Quinta Normal, Curic\u00f3, Chill\u00e1n y Temuco. Fuente: Direcci\u00f3n Meteorol\u00f3gica de Chile (DMC).<\/em><\/p>\n<h6><strong>Un nuevo r\u00e9gimen<\/strong><\/h6>\n<p>La megasequ\u00eda de Chile central \u2013que corresponde al periodo ininterrumpido de precipitaciones deficitarias que comenz\u00f3 el 2010 y que se extiende hasta la actualidad\u2013 ha alterado el r\u00e9gimen hist\u00f3rico de incendios, aumentando el \u00e1rea quemada, el n\u00famero de eventos fuera del verano y la simultaneidad de los eventos (<a href=\"https:\/\/esajournals.onlinelibrary.wiley.com\/doi\/10.1002\/ecs2.2300\">Gonz\u00e1lez et al., 2018<\/a>). Dentro de este periodo de cambio, la temporada 2016-2017 no tiene precedentes: aunque el n\u00famero de incendios fue relativamente inferior al promedio, el \u00e1rea quemada total alcanz\u00f3 las 560.000 ha, lo que equivale a diez veces el promedio hist\u00f3rico. En efecto, tal r\u00e9cord de superficie afectada se debi\u00f3 mayormente a la ocurrencia de cuatro megaincendios (m\u00e1s de 50.000 ha quemadas en cada uno de ellos) en las regiones del Maule y O\u2019Higgins durante la segunda mitad de enero de 2017. Entre ellos, el evento que comenz\u00f3 en Las M\u00e1quinas (Regi\u00f3n del Maule) corresponde al mayor registrado en Chile, con m\u00e1s de 160.000 ha quemadas (Figura 2). Adem\u00e1s de afectar \u00e1reas muy extensas, estos megaincendios se caracterizaron por su extrema intensidad cal\u00f3rica y r\u00e1pida propagaci\u00f3n, vali\u00e9ndoles el termino de \u201ctormentas de fuego\u201d (<a href=\"https:\/\/link.springer.com\/article\/10.1007\/s13280-018-1084-1\">Bowman et al., 2018<\/a>) o \u201cincendios de sexta generaci\u00f3n\u201d (<a href=\"https:\/\/www.conaf.cl\/incendios-forestales\/tormenta-de-fuego-en-chile\/\">CONAF 2018<\/a>).<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2.jpg\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\" td-modal-image aligncenter wp-image-39139 size-large\" src=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-1024x498.jpg\" alt=\"\" width=\"696\" height=\"338\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-1024x498.jpg 1024w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-300x146.jpg 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-768x374.jpg 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-696x339.jpg 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-1068x520.jpg 1068w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2-863x420.jpg 863w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-2.jpg 1393w\" sizes=\"(max-width: 696px) 100vw, 696px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><em><strong>Figura 2.<\/strong> Im\u00e1genes del sat\u00e9lite Terra-MODIS (NASA) en la banda 7-2-1, que destaca la vegetaci\u00f3n (color verde) y las cicatrices de incendios (tonos rojizos). Las im\u00e1genes muestran zonas distintas, pero tienen la misma escala. Como una manera de evidenciar la extensi\u00f3n del incendio, se a\u00f1adi\u00f3 un c\u00edrculo blanco que tiene el \u00e1rea de la ciudad de Santiago. El panel (a) es del 2 de febrero de 2017 y exhibe la cicatriz del megaincendio Las M\u00e1quinas, entre Constituci\u00f3n y Talca. El panel (b) es del 21 de febrero de 2023 y muestra la cicatriz del megaincendio Santa Ana, entre Concepci\u00f3n y Los \u00c1ngeles.<\/em><\/p>\n<p>Luego del 2016-2017, las siguientes temporadas de incendios estuvieron dentro de los rangos hist\u00f3ricos en cuanto a n\u00famero de evento y \u00e1rea quemada. Hasta que lleg\u00f3 la actual temporada (2022-2023). Varios incendios de magnitud en diciembre y enero, incluyendo un evento dram\u00e1tico en la periferia de Vi\u00f1a del Mar el d\u00eda antes de Navidad, elevaron el \u00e1rea quemada total a unas 100.000 ha. Luego, a comienzos de febrero, se generaron varios incendios en las regiones del \u00d1uble, del Biob\u00edo y la Araucan\u00eda, los que alcanzaron la categor\u00eda de megaincendios debido a su extensa duraci\u00f3n, intensidad y \u00e1rea quemada. Dentro de estos eventos destaca el de Santa Ana, comuna de Santa Juana, que consumi\u00f3 m\u00e1s de 120.000 ha (Figura 2); una porci\u00f3n importante del total fue quemada en los primeros tres d\u00edas de desarrollo y reci\u00e9n se pudo controlar varias semanas despu\u00e9s (Figura 3).<\/p>\n<p>El impacto m\u00e1s dram\u00e1tico de esta temporada, en especial de los incendios de febrero de 2023, son las 25 v\u00edctimas fatales. A esto se suman las m\u00e1s de 450.000 ha consumidas (ocho veces el promedio hist\u00f3rico), lo que ha producido un costo socioambiental y econ\u00f3mico, particularmente en los sectores forestal, agr\u00edcola y de turismo, a\u00fan por cuantificar, pero que, sin duda, ser\u00e1 enorme. Tambi\u00e9n habr\u00e1 que evaluar las emisiones de di\u00f3xido de carbono a la atm\u00f3sfera y su impacto en la salud humana producto de la p\u00e9sima calidad del aire. En efecto, los niveles de material particulado se mantuvieron en el rango de emergencia por varios d\u00edas, en localidades cercanas y apartadas de los incendios (Figura 3).<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3.png\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\" td-modal-image aligncenter wp-image-39140\" src=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3.png\" alt=\"\" width=\"500\" height=\"530\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3.png 787w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3-283x300.png 283w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3-768x815.png 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3-696x738.png 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-3-396x420.png 396w\" sizes=\"(max-width: 500px) 100vw, 500px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><em><strong>Figura 3.<\/strong> El verano de 2023. Series diarias de (a) temperatura m\u00e1xima en Temuco y (b) m\u00e1xima magnitud del viento registrada en la estaci\u00f3n Termas de Chill\u00e1n (DMC). <\/em>(c) <em>\u00c1rea quemada diaria (preliminar, CONAF) en todo Chile, mayormente debido a los incendios en las regiones del \u00d1uble y del Biob\u00edo. <\/em>(d) <em>Promedio diario del material particulado fino (MP<sub>2.5<\/sub>) en las estaciones Linares, Hualqui y Rancagua (SINCA-MMA).<\/em><\/p>\n<h6><strong>Meteorolog\u00eda extrema<\/strong><\/h6>\n<p>En un <a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/analisis-cr2-meteorologia-extrema-uno-de-los-factores-tras-los-incendios-de-febrero-2023-en-el-centro-sur-de-chile\/\">an\u00e1lisis previo<\/a>, publicado al comienzo de los megaincendios de febrero de 2023, se presentaron detalles de la condiciones meteorol\u00f3gicas que sirvieron de tel\u00f3n de fondo a estos eventos catastr\u00f3ficos, las que se sintetizan en los paneles superiores de la Figura 3 y que incluyen: un evento c\u00e1lido extremo en la zona centro sur, fuerte viento Puelche (del Este) en la zona precordillerana e intenso viento del sur en la zona costera. Los patrones de viento son claves para determinar el avance de los incendios. Por ejemplo, la explosiva propagaci\u00f3n de los incendios del 3 y 4 de febrero de 2023 se produjo en direcci\u00f3n al norponiente, justamente, debido a los intensos vientos predominantes en la zona durante esos d\u00edas (Figura 4).<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4.png\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\" td-modal-image aligncenter wp-image-39141 size-full\" src=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4.png\" alt=\"\" width=\"934\" height=\"342\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4.png 934w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4-300x110.png 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4-768x281.png 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-4-696x255.png 696w\" sizes=\"(max-width: 934px) 100vw, 934px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><em><strong>Figura 4.<\/strong> (a) Extensi\u00f3n de los incendios el d\u00eda 2 de febrero, (b) acumulado del 2 y 3 febrero, y (c) acumulado del 2,3 y 4 de febrero. Se puede apreciar que los incendios avanzaron en direcci\u00f3n noroeste a velocidades muy altas durante el 3 y 4 de febrero, en congruencia con los fuertes vientos provenientes desde el sureste que imperaron en la zona durante esos d\u00edas. Fuente: NASA FIRMS, sensores VIIRS 375 de los sat\u00e9lites NOAA-20 y Suomi NPP.<\/em><\/p>\n<p>Es importante destacar que, durante los primeros d\u00edas de febrero del 2023, las temperaturas (y probablemente el viento) fueron extremas, con valores por encima de los 40 \u00b0C en varias estaciones de \u00d1uble, Biob\u00edo y la Araucan\u00eda, como lo muestra el mapa de la Figura 5. Empleando la estad\u00edstica hist\u00f3rica, estos valores ocurren \u2013en promedio\u2013 una vez por siglo, aunque ya veremos que la estad\u00edstica est\u00e1 cambiando. Una situaci\u00f3n similar, con temperaturas m\u00e1ximas sobre los 40 \u00b0C en una amplia zona del Maule coincidi\u00f3 con la etapa m\u00e1s agresiva del megaincendio de Las M\u00e1quinas entre el 25 y 26 de enero del 2017 (Figura 5).<\/p>\n<p>As\u00ed, aunque la muestra es limitada, podemos sugerir que los megaincendios que est\u00e1n ocurriendo en este nuevo r\u00e9gimen de fuego en Chile central se asocian a condiciones meteorol\u00f3gicas extremas. Sin embargo, en el caso de Chile, pr\u00e1cticamente todos los incendios comienzan con una ignici\u00f3n producto de una acci\u00f3n humana, ya sea accidental o intencional. Bajo condiciones medias o incluso durante una ola de calor \u201cordinaria\u201d (ver <a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/analisis-cr2-ola-calor\/\">este an\u00e1lisis<\/a>; digamos un evento de temperaturas m\u00e1ximas en torno a los 35 \u00b0C en Chile central), es esperable que los incendios se propaguen e incluso que algunos se conviertan en eventos de magnitud. No obstante, los eventos de enero de 2017 y febrero de 2023 sugieren que aquellas igniciones que ocurren en d\u00edas con temperaturas sobre los 40 \u00b0C pueden convertirse en megaincendios que consumen cientos de miles de hect\u00e1reas en unos pocos d\u00edas, de muy dif\u00edcil control y que gatillan una cat\u00e1strofe socioambiental. En t\u00e9rminos simples, las olas de calor extremas y los vientos intensos permiten que la propagaci\u00f3n de los incendios sea explosiva, pasando de incendios forestales \u201cnormales\u201d a verdaderas \u201ctormentas de fuego\u201d.<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5.png\"><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\" td-modal-image aligncenter wp-image-39142\" src=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5.png\" alt=\"\" width=\"500\" height=\"415\" srcset=\"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5.png 818w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5-300x249.png 300w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5-768x637.png 768w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5-696x578.png 696w, https:\/\/www.cr2.cl\/wp-content\/uploads\/2023\/03\/FIGURA-5-506x420.png 506w\" sizes=\"(max-width: 500px) 100vw, 500px\" \/><\/a><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"><em><strong>Figura 5.<\/strong> Temperaturas m\u00e1ximas registradas en los d\u00edas previos y durante el inicio de dos megaincendios en Chile central. El panel (a) muestra el periodo entre el 25 y el 27 enero de 2017 en relaci\u00f3n con el incendio de Las M\u00e1quinas. El panel (b) muestra el periodo entre el 3 y 5 de febrero de 2023 en relaci\u00f3n con el incendio de Santa Ana. El \u00e1rea quemada en cada caso se indica, aproximadamente, por el \u00f3valo de color negro. Fuente: DMC, AgroMet, MeteoRed, CEAZA.<\/em><\/p>\n<h6><strong>Mirando hacia adelante<\/strong><\/h6>\n<p>Las series anuales en la Figura 1 ofrecen una perspectiva temporal de la ocurrencia de los megaincendios en Chile. En ella se puede apreciar que en los \u00faltimos siete a\u00f1os se han concentrado las dos temporadas r\u00e9cord en cuanto a \u00e1rea quemada y tres veranos con eventos de temperaturas extremas en el centro-sur de Chile. Llama la atenci\u00f3n que en el verano de 2019, cuando tambi\u00e9n ocurri\u00f3 un evento extremo (mayor a 40 \u00b0C) en la zona centro-sur, no se registr\u00f3 un megaincendio. Lo anterior enfatiza que en Chile la meteorolog\u00eda extrema provee las condiciones propicias para la violenta propagaci\u00f3n de un incendio, pero no su ignici\u00f3n. Sin la ignici\u00f3n humana y un paisaje propicio los incendios no ocurrir\u00edan.<\/p>\n<p>Por otro lado, la ocurrencia de eventos extremos de temperatura en la zona central no tiene precedentes en la historia reciente. De hecho, la probabilidad de observar tres de ellos en siete a\u00f1os consecutivos por mera coincidencia es baj\u00edsima, lo que sugiere una alteraci\u00f3n en su distribuci\u00f3n de frecuencia debido al cambio clim\u00e1tico en curso. Es decir, la tendencia positiva de la temperatura m\u00e1xima en el Valle Central del centro-sur de Chile juega un rol importante en este fen\u00f3meno. Una atribuci\u00f3n estad\u00edstica formal y una explicaci\u00f3n f\u00edsica de c\u00f3mo estos eventos se asocian al cambio clim\u00e1tico est\u00e1 en desarrollo.<\/p>\n<p>En suma, estamos viviendo un nuevo r\u00e9gimen de incendios forestales en el centro-sur de Chile y las proyecciones de un clima m\u00e1s seco y c\u00e1lido en las pr\u00f3ximas d\u00e9cadas lo continuar\u00e1n asentando. El estudio de los factores que inciden en estos eventos contribuye a tomar decisiones bien informadas que propendan a su mitigaci\u00f3n en el futuro. La comprensi\u00f3n de aspectos asociados a la meteorolog\u00eda extrema podr\u00e1 mejorar la predicci\u00f3n de las condiciones que favorecen el desarrollo de los megaincendios, sobre todo tomando en cuenta que la capacidad de combate del fuego en la fase inicial de cada evento es fundamental. Si bien es imposible modificar el clima, s\u00ed es posible generar mecanismos para mitigar su impacto. En principio, estos debieran abordar, al menos: (a) sistemas de alerta temprana ante eventos meteorol\u00f3gicos altamente riesgosos, (b) manejo adecuado de la vegetaci\u00f3n y el combustible vegetal en el territorio, no solo alrededor de centros poblados, sino en toda el paisaje rural-forestal, y (c) reducci\u00f3n de las fuentes de ignici\u00f3n humana en el paisaje, ya sea por motivos accidentales o intencionales.<\/p>\n<h5><strong>Referencias<\/strong><\/h5>\n<div class=\"wpb_text_column wpb_content_element \">\n<div class=\"wpb_wrapper\">\n<p>Bowman, D. M., Moreira-Mu\u00f1oz, A., Kolden, C. A., Ch\u00e1vez, R. O., Mu\u00f1oz, A. A., Salinas, F., Gonz\u00e1lez-Reyes, \u00c1., Rocco, R., De La Barrera, F., Williamson, G., Borchers, N., Cifuentes, L., Abatzoglou, J., &amp; Johnston, F. H. (2019). Human\u2013environmental drivers and impacts of the globally extreme 2017 Chilean fires. <i>Ambio<\/i>,\u00a0<i>48<\/i>, 350-362.<\/p>\n<p>CONAF. (2018).\u00a0<em>Tormenta de fuego en Chile<\/em>. Ministerio de Agricultura. <a href=\"https:\/\/www.conaf.cl\/incendios-forestales\/tormenta-de-fuego-en-chile\/\">https:\/\/www.conaf.cl\/incendios-forestales\/tormenta-de-fuego-en-chile\/<\/a><\/p>\n<p>Gonz\u00e1lez, M. E., G\u00f3mez\u2010Gonz\u00e1lez, S., Lara, A., Garreaud, R., &amp; D\u00edaz\u2010Hormaz\u00e1bal, I. (2018). The 2010\u20132015 Megadrought and its influence on the fire regime in central and south\u2010central Chile.\u00a0<i>Ecosphere<\/i>,\u00a0<i>9<\/i>(8), e02300.<\/p>\n<p>Gonz\u00e1lez, M.E., Sapiains, R., G\u00f3mez-Gonz\u00e1lez, S., Garreaud, R., Miranda, A., Galleguillos, M., Jacques, M., Pauchard, A., Hoyos, J., Cordero, L., V\u00e1squez, F., Lara, A., Aldunce, P., Delgado, V., Arriagada, Ugarte, A.M., Sep\u00falveda, A., Far\u00edas, L., Garc\u00eda, R., Rondanelli, R.,J., Ponce, R.,Vargas, F., Rojas, M., Boisier, J.P., C., Carrasco, Little, C., Osses, M., Zamorano, C., D\u00edaz-Hormaz\u00e1bal, I., Ceballos, A., Guerra, E., Moncada, M., Castillo, I . (2020).\u00a0<em>Incendios forestales en Chile: causas, impactos y resiliencia.<\/em>\u00a0Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, (ANID\/FONDAP\/15110009), 84 pp. Disponible en\u00a0<a href=\"https:\/\/www.cr2.cl\/incendios\/\" target=\"_blank\" rel=\"noopener noreferrer\" data-saferedirecturl=\"https:\/\/www.google.com\/url?q=https:\/\/www.cr2.cl\/incendios\/&amp;source=gmail&amp;ust=1599048117576000&amp;usg=AFQjCNE1EPZBEQTM-YylcdPNVwYYM23Znw\">https:\/\/www.cr2.cl\/<wbr><\/wbr>incendios\/<\/a><\/p>\n<p>Urrutia\u2010Jalabert, R., Gonz\u00e1lez, M. E., Gonz\u00e1lez\u2010Reyes, \u00c1., Lara, A., &amp; Garreaud, R. (2018). Climate variability and forest fires in central and south\u2010central Chile. <i>Ecosphere<\/i>,\u00a0<i>9<\/i>(4), e02171.<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Por Ren\u00e9 Garreaud, director (CR)2 y acad\u00e9mico DGF-U.Chile; Mart\u00edn Jacques, investigador (CR)2 y acad\u00e9mico DGEO-UdeC; y An\u00edbal Pauchard, investigador IEB y acad\u00e9mico Forestal-UdeC\u00a0 Los veranos de los a\u00f1os 2017 y 2023 han revelado un nuevo y desolador r\u00e9gimen de incendios forestales en la zona centro-sur de Chile, en que unos pocos eventos experimentan una r\u00e1pida [&hellip;]<\/p>\n","protected":false},"author":36,"featured_media":39160,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[13,899,28,30,1496],"tags":[1283,182],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/39137"}],"collection":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/users\/36"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=39137"}],"version-history":[{"count":16,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/39137\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":39164,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/39137\/revisions\/39164"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/media\/39160"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=39137"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=39137"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.cr2.cl\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=39137"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}